Los enfermeros del Infanta Elena y los de la prisión provincial han llevado a cabo un total de cuatro talleres de educación para la salud en los que han participado cerca de 200 reclusos. Los temas que se han tratado han sido higiene postural y nociones básicas de mecánica corporal, diabetes, medidas de prevención frente al tabaquismo y salud sexual.

Cabe destacar que de los 45 internos que están diagnosticados de diabetes han acudido 35. Según los resultados de este taller, los enfermeros señalan que se ha reducido en el 80% el número de descompensaciones de las que suelen ser objeto. Por lo que respecta al tabaquismo han sido 30 los internos asistentes, seleccionados del módulo 6 que alberga la unidad terapéutica experimental (proyecto pionero en Huelva, que pretende conseguir un módulo libre de drogas). En este taller se ha dejado una vez más patente el interés de algunos reclusos en abandonar el hábito. En otro orden de cosas, profesionales sanitarios de la prisión han recibido diferentes cursos de formación para el perfeccionamiento de diferentes técnicas quirúrgicas básicas, gracias a un curso del servicio de Cirugía del Infanta Elena.

Esta iniciativa permite a estos profesionales mejorar sus técnicas en lo que se refiere a cirugía menor ambulatoria que sólo necesita de anestesia local con bajo nivel de complicaciones, no duran más de 15 minutos, no originan inestabilidad metabólica o cardiopulmonar y requieren de cuidados postoperatorios mínimos. Este tipo de intervenciones, que incluyen cirugía, dermatología, otorrinolaringología, proctología, oftalmología y urología, entre otras, pueden ser resueltas en la prisión sin necesidad de desplazar al paciente hasta el hospital.