El Ayuntamiento de Huelva paga al año 14,5 millones de euros para saldar la deuda que tiene con proveedores. Una cuantía que se no se dejará de pagar hasta el año 2039 y que sale del bolsillo de los onubenses. Esta deuda viene de tres planes de pago a proveedores a los que el anterior equipo de Gobierno, del Partido Popular, se acogió, además de un plan extraordinario. Así, el Consistorio onubense hace frente a cuatro créditos de deuda cada año, según apuntó el Ayuntamiento capitalino a Huelva Información. Los 14,5 millones de euros sirven para realizar el pago de facturas anteriores al año 2014, y continuarán ejecutándose durante 20 años más, según confirmó el servicio económico del Consistorio local. Esta cuantía anual de pago obligatorio supone hasta un 11% del presupuesto total del Ayuntamiento de Huelva entre enero y diciembre. Los créditos de los tres planes de pago más el extraordinario suponen una montante total de 186,7 millones de euros.

Hay que sumar también a esta deuda las “sentencias judiciales de impagos del Partido Popular” que están llegando ahora al Consistorio y que “hay pagarlas”. Todas estas circunstancias no hacen otra cosa que “mermar” la economía del propio Ayuntamiento. Con todo esto, la actividad municipal continúa con todos los pagos obligatorios como al personal, o referentes a inversiones en la capital, así como “los planes de asfaltado”, entre otras cuestiones, “y sin olvidarnos que no se están subiendo los impuestos. O se bajan o se modifican”. Así, desde el Consistorio explican a este periódico que la “situación de la que se viene es muy complicada”, donde tampoco se suma el pago a proveedores de la acciones actuales. Facturas comerciales a proveedores que tienen un retraso en el pago de 56 días a fecha de julio. Una cifra que se sitúa por encima de los 30 días que marca la Ley de Morosidad.

Desde el Ayuntamiento señalan que no están orgullos del retraso en estos pagos, pero “se trabaja y se aspira al máximo legal”, aunque “hay que recordar que se cogió un Ayuntamiento en bancarrota” con los tres planes de pago a proveedores más el plan extraordinario.

El retraso de estos pagos actuales ha descendido en tres días, pasando de los 59 a los 56, después de que la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos (ATA), arrojase los datos de los municipios que más tardan en pagar correspondientes al primer semestre del año. Con las cifras, a pesar de que la Ley de Morosidad sitúa como tope 30 días para hacer frente las facturas a proveedores, es cierto que las administraciones locales son las peores pagadoras, se señaló en el informe, puesto que la media es de hasta 65 días. Huelva se encuentra por debajo de esa media pero todavía está lejos de la treintena de días. En comparación con el resto de ayuntamientos de las capitales andaluzas, Huelva no ocupa un buen lugar ya que está por debajo de consistorios como el de Almería, que cumple la Ley con un retraso en el pago de 17 días a proveedores autónomos, o Málaga que se encuentra justo en los 30 días. El resto de ayuntamientos está por encima de la morosidad como Cádiz, con 43 días, Córdoba (34) o Sevilla (40).

Distinta es la situación de los consistorios de Jaén o Granada, que con 542 y 207 días, respectivamente, están en una situación mucho más complicada que la que existe en la capital onubense. Además, el Ayuntamiento de Jaén es el que más tarda de todo el país en hacer frente a estas facturas comerciales. El podio de los más lentos para pagar lo completan Jerez de la Frontera con 320 días y el ya mencionado ayuntamiento de Granada.

En el informe aparecen grandes municipios del país, en cuanto al número de habitantes, y entre ellos el de Roquetas de Mar, es el segundo de España que menos tiempo tarda en pagar sus facturas a los proveedores autónomos con un plazo de 11 días. Sólo le supera el Ayuntamiento de Zamora que marca su tardanza en 9 días. En el marco andaluz, ningún otro municipio se encuentra dentro de los diez ayuntamientos más rápidos en pagar.

“Tanto en la administración pública como desde las grandes empresas privadas se siguen incumpliendo los periodos medios de pago con los autónomos. La morosidad es uno de los principales problemas que sufren los autónomos y que frenan en seco su continuidad y consolidación. No nos vamos a cansar de pedir un régimen sancionador para aquellos que incumplan los plazos de pago estipulados por la ley”, señalo el presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Trabajadores Autónomos, Lorenzo Amor. Así, remarcó que “muchos autónomos se ven abocados a cerrar por no poder soportar los impagos de aquellos para los que realizan trabajos, adelantando recursos, materiales y esfuerzo. Para que los autónomos no sufran más deben recibir el pago de su trabajo en tiempo y forma”.