A juzgar por los datos, parece que junio es el mes en el que se inició la recuperación económica en el sector turístico. El proceso será largo –primero tiene que terminar la pandemia– hasta llegar a la cifras que se manejaban en el ejercicio de 2019. El camino puede dar años. Aun así junio, en plena antesala del verano arrancó el retorno de una buena parte de los turistas que acostumbraban a veranear en la provincia de Huelva. Esto se debió principalmente a la finalización del estado de alarma en el país, que llevó consigo la eliminación de muchas de las restricciones que existían como la movilidad o el toque de queda. Estos factores ya se reflejaron en el ámbito hotelero, que recuperó a un 86% de los visitantes y de igual modo ocurrió en los apartamentos turísticos, alojamientos rurales y campings. Cierto es, que las cifras extrahoteleras que aparecen en el Instituto Nacional de Estadística no llegan a los niveles hoteleros pero es un paso aceptable en el cierre del primer semestre del año.

Como se acostumbre, dentro del campo extrahotelero, los campings son los que mayor número de viajeros atraen en el territorio onubense. Hasta aquí llegaron en junio un total de 22.009 visitantes, la gran mayoría residentes en el país: 20.729 (algo lógico en las cuentas de Huelva). De esta forma, se recuperaron tres cuartas partes con respecto al mismo mes de 2019, cuando se contabilizaron hasta 29.034 clientes. Y ya se quedan atrás la cifra de 8.503 turistas de junio del pasado año, un ejercicio que el sector quiere ya olvidar. Los datos de pernoctaciones en los campings onubenses en el mes de junio fueron incluso mejores que los de viajeros. Es decir, vinieron menos clientes pero se quedaron más tiempo. Tanto es así que se contabilizaron hasta 84.606 pernoctaciones, prácticamente igual al 2019, cuando se registraron 87.378. La consecuencia directa de estos números es el crecimiento de la estancia media. Así, los viajeros se quedaron una media de 3,84 en la provincia de Huelva, mientras que en 2019 lo hicieron 3,01 días. Es más, durante el cierre del primer semestre del año abrieron sus puertas 11 establecimientos y se registró una ocupación por parcelas de un 27,19%, casi seis puntos más que en el mismo período de tiempo de 2019.

Por otro lado, los apartamentos turísticos consiguieron hospedar a 6.908 visitantes durante el pasado mes de junio. No recuperaron tanto terreno como los campings ya que en 2019 registraron 15.419 turistas. Más del doble. Lo mismo ocurrió con las pernoctaciones que fueron este año 26.539, mientras que hace dos fueron 54.322. Eso sí, este ejercicio no estuvieron disponibles tantos apartamentos como entonces. Este año se contabilizaron 807 mientras que en 2019 se superaban los 1.100. De esta forma, plazas hubo casi 2.000 menos. Asimismo, la ocupación cayó unos 8 puntos y se situó en un 27,32%. Lo que sí aumentó fue la estancia media de los clientes que se colocó en 3,84 días.

Por último, los alojamientos rurales contabilizaron 1.819 visitantes durante el pasado mes de junio, mientras que en junio de 2020 fueron 1.123 y en 20129 fueron 3.495. La gran mayorías de los clientes llegaron desde otro punto del país puesto que sólo 24 lo hicieron desde el extranjero. La estancia media creció con respecto a 2019 pasando de los 1,99 días a los 2,13 días. Eso sí, la ocupación se quedó en un 12,38%, mientras que en 2020 fue del 11,34% y en 2019 un 28,01%.