Una vez que la temporada estival cerró en septiembre, aunque se puede considerar abierta hasta el puente de octubre, el turismo en Huelva muestra un descenso de visitantes, algo habitual y por lo que se pretende reaccionar con el objetivo de desestacionalizar el destino. El segmento del golf, y los eventos y congresos, son algunas de las herramientas en las que se sustenta esta acción de alargar los números una vez que octubre entra en escena y el sol y la playa se apagan hasta el año que viene.

Hay que comparar con el año 2019 para hacer un análisis más realista de cuál es la situación ya que el 2020 fue un año prácticamente perdido debido a las fuertes restricciones que dejó la pandemia del coronavirus. En este escenario, dentro de los establecimientos extrahoteleros, los campings y los apartamentos turísticos aguantaron el tirón de octubre con respecto a la prepandemia. Incluso en algunos aspectos se superaron las cifras turísticas, según los datos del Instituto Nacional de Estadística.

En el caso concreto de los campings, la provincia de Huelva recibió a un total de 11.174 visitantes –entra nacionales e internacionales– en octubre, algo menos que en el mismo período de tiempo de 2019 (11.922) pero con una mejora sustancial en el número de pernoctaciones. Tanto es así, que la cifra de noches aumentó hasta un 33,96% pasando de las 35.645 a las 47.750, que se dividieron en 38.478 de visitantes españoles y 9.275 de turistas extranjeros. Una gran noticia que también se reflejó en un crecimiento de la estancia media. Así, si en octubre del ejercicio de 2019 los visitantes se quedaron en los campings onubenses una media de 2,99 días, en este año la cuenta salió 4,27 días de media. En ambos años la cifra establecimientos abiertos fue la misma (10). Por último, la leve caída en el número total de turistas provocó que la ocupación en los campings de la provincia de Huelva cayese más de siete puntos, pasando de un 28,73% a un 21,37%.

Por su parte, los apartamentos turísticos del territorio onubense aumentaron tanto su número de visitantes como de pernoctas en comparación con el mes de octubre de 2019. Así, la cifra de turistas creció en unos 300 pasando de los 3.124 a los 3.428; mientras que la cifra de noches pasó de las 8.126 a las 10.204. Y todo esto, con menos plazas y apartamentos disponibles. De esta manera hubo 487 establecimientos –en 2019 hubo 543– con un total de 1.965 plazas –en 2019 se contabilizaron 2.165–. Esto es consecuencia directa tanto del crecimiento de la estancia media, pasando de los 2,60 días a los 2,98; así como de la ocupación que subió de un 12,11% a un 16,70%.

En la cruz de la moneda están los alojamientos rurales, que no consiguieron sellar los números de la prepandemia durante el mes de octubre. Así, los viajeros descendieron hasta un 33,32% y las pernoctaciones un 33,72%. De este modo, la cifra de viajeros que se contabilizó en el ejercicio de 2019 fue de 12.612 mientras que este año se registraron 8.410 visitantes, sumando los nacionales y los internacionales. De este modo, las pernoctas cayeron desde las 14.296 a las 9.476. Sin embargo, la estancia media subió de 2,05 días a 2,52. Entre otros números, en octubre hubo disponibles un total de 140 establecimientos con carácter rural, que integraron 1.307 plazas. La ocupación que se registró fue de un 23,25%, más de 11 puntos menos que en 2019.