En torno al Banco de Alimentos se establece una gran cadena solidaria con punto de partida en los ciudadanos, que con su granito de arena contribuyen a mejorar la calidad de vida de los más desfavorecidos. También de aquellas empresas que, dentro de su obra social, contemplan la donación de parte de sus productos a entidades para cubrir necesidades básicas de las personas más necesitadas.

En la recogida, clasificación y distribución de estos alimentos juegan un papel fundamental los voluntarios. Sin ellos nada de esto sería posible. Hay sesenta y cuatro fijos que están ahora inmersos en los preparativos de la gran recogida de alimentos que se llevará a cabo los próximos 25 y 26 de noviembre en 127 medianas y grandes superficies comerciales de la provincia. El objetivo es superar la cifra alcanzada el pasado año, 150.000 kilos, y para ello necesitan a más voluntarios para poder estar presentes en los distintos supermercados en los que se va a realizar la campaña.

El Banco de Alimentos atiende actualmente a 17.000 personas en la provincia onubense, de las cuales 8.000 son de la capital. El perfil de los beneficiarios es muy variado. "Ha aumentado el número de personas procedentes de la antigua clase media que han bajado de nivel, es gente que antes estaba fuera del umbral de la pobreza y que ahora con la crisis económica ha entrado, y sobre todo emigrantes que han venido a trabajar a Huelva y se han quedado sin trabajo", apuntó el presidente del Banco de Alimentos, Juan Manuel Díaz Cabrera.

Aparte, se colabora con distintas entidades, entre ellas el Comedor Virgen de la Cinta y la Ciudad de los Niños. Puesto en marcha hace treinta y tres años por un grupo de personas que querían hacer algo por la sociedad, el Comedor Virgen de la Cinta da almuerzo a una media diaria de 150 personas. Se trata de ciudadanos con pocos recursos, entre ellos emigrantes de distintas nacionalidades. En esta iniciativa están implicadas cuarenta voluntarias. Si no fuera por la aportación de alimentos no podría seguir adelante.

En la Ciudad de los Niños se ofrece a los alumnos un servicio de desayuno y merienda, que no cuenta con ningún tipo de subvención, y de comedor, al que en los últimos años no han concedido ninguna beca. De estos servicios, que se ponen a disposición del alumnado de lunes a viernes, se benefician más de cien niños gracias a la colaboración del Banco de Alimentos.