en el titán

El año del edificio de Hacienda

  • lA pesar de llevar más de dos décadas cerrado, es el centro de las grandes celebraciones

  • Constituyó el gran retablo de la Procesión Magna y ahora abre 2017 con las campanadas

El balcón lo abrieron para las campanadas. Más de dos décadas cerrado y se pudo al final abrir para las campanadas que Canal Sur retransmitió desde el reloj del Ayuntamiento de Huelva. Todo quedó limpio e impecable para que

El balcón lo abrieron para las campanadas. Más de dos décadas cerrado y se pudo al final abrir para las campanadas que Canal Sur retransmitió desde el reloj del Ayuntamiento de Huelva. Todo quedó limpio e impecable para que / josué correa

Está en el corazón de la ciudad, donde se deja sentir todo el latido de una Huelva empeñada en salir adelante. En los años cincuenta la Gran Vía diseccionó un barrio marinero para dejar que se viera el corazón mismo de ella desde El Punto, haciéndole una nueva entrada a la Nacional 435 que de aquí arranca y nos abría entonces al exterior; ahora es la Autopista del 92, pero se queda taponada en la Plaza Quintero Báez.

Desde que dejara de prestar sus funciones para la Delegación de Hacienda, que se trasladó al ese edificio horroroso que está en el Paseo de Santa Fe, las miradas se dirigieron siempre al inmueble neoherreriano. Lo cierto es que en esta ciudad, donde nos acostumbramos a que todo llegue tarde, lo tuvo desde el primer momento en su lista de reivindicación del patrimonio.

Está ahí como testigo de los grandes acontecimientos de la ciudad y la pregunta de todos es quién sería su novia. Mucho tiempo ha tardado la Junta de Andalucía, que es su propietaria, para decidirse a llevar hasta allí la sede de la Delegación del Gobierno.

Mientras tanto, la ciudad que nada tiene que ver con lo que le gusten a unos políticos y a otros, sabe que la Gran Vía fue un acierto y que aquí se levantaron edificios que hoy son emblemáticos. Lo mismo que en su momento lo fue la calle Puerto o la Plaza de San Pedro, que supieron acoger con dignidad la representación de las instituciones de la ciudad. Los onubenses se ampararon en esta arteria que con su estilo neoherreriano nos traslada más a Madrid que a un barroco andaluz. Pero ahí está, integrado en el paisaje onubense en todas las celebraciones. Tomó especial relieve convirtiéndose en el gran retablo de la coronación canónica de María Santísima de la Victoria y lo fue también este año para la Procesión Magna organizada por el Consejo de Hermandades.

En ambos acontecimientos se marcó para el adorno de la fachada la mayor de las seguridades ante la presencia de un edificio que si tiene algún diagnóstico que pueda ser un peligro para los ciudadanos pues no hay nada que lo avise.

Ambos acontecimientos cofrades lo que hicieron es realzar la belleza exterior de este edificio.

Ahora fueron los equipos de Canal Sur los que entraron en el interior para desde la habitación del balcón principal poder retransmitir las campanadas por el reloj del Ayuntamiento de Huelva, en la fiesta para recibir el 525 Aniversario del Descubrimiento de América. Así las cosas, nuestro antiguo edificio rejuvenecido y convertido en plató de televisión, con todo su personal, sus presentadores, cámaras...

Nos hubiese gustado un plano de cómo se encuentra el mural de la provincia que estaba en el hall de entrada y, de paso, una panorámica del interior que permanece oculto y cerrado a cal y canto.

Con estas campanadas de Canal Sur esperamos que sean las que den paso a un 2017 en el que de verdad se restaure el edificio y lo hayamos incluido en el patrimonio recuperado para todos los onubenses.

Todo está ahora en manos de la Junta de Andalucía, habrá que animarles a ello.

Durante este tiempo cerrado se habló de la situación del edificio, de los deterioros que pueda sufrir por el abandono de estos 23 años. Gracias a cómo fue realizado, cuenta con una gran losa de hormigón que solventó unas incidencias iniciales y hoy le da solidez. Una de las cuestiones que parecen se discute es apropiarle una planta. Lo cierto es que en esta ciudad estamos acostumbrados a más de una barbaridad, desde la joroba que le añadieron al edificio de la Gota de Leche, de propiedad municipal; a las plantas áticos del edificio del antiguo hotel París, en la plaza de las Monjas; o las nuevas alturas permitidas en la Plaza de San Pedro. Más cerca de este edificio se planteó necesaria una nueva planta, así como accesos de garaje, en la sede del Servicio Andaluz de Salud, acertadamente restaurado, al menos, para mantener la configuración de centros oficiales de la zona.

¡Feliz 2017! Deseamos que sea, de verdad, el año de la restauración del antiguo edificio de Hacienda.

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