“¿Que había esta tarde en Huelva? ¿De dónde ha salido tanta gente?”, se preguntaban el viernes, bien entrada la noche, las camareras de una conocida cafetería del centro de la ciudad. Simplemente que ya estamos en Navidad.

Ni el Black Friday de la semana anterior consiguió movilizar tanto gentío en la calle. El viernes tarde era momento de despedida de este frío y lluvioso noviembre y de preparar la bienvenida a un diciembre que será parecido en lo meteorológico pero con más brillo y luminosidad que antes.

El alumbrado navideño parecía, incluso, que anoche lucía de otra forma, más alegre, quizá por el acompañamiento de ese calor humano que ya empiezan a desprender grupos ávidos de reencuentros y celebraciones.

Ambiente y colorido navideño en la Plaza de las Monjas.

Diciembre es mes de cenas y comidas. Este fin de semana se ha empezado a comprobar ya en bares y restaurantes repletos, algunos con largas mesas ocupadas por hambrientos de fiesta, más que de estómago.

Si las rebajas de hace una semana fueron el inicio elegido para alumbrar la ciudad y animarla desde el comercio, esta vez ha sido la hostelería la que ha entrado en campaña navideña, desafiando las bajas temperaturas.

Pero ni eso ha impedido que las calles del centro se llenaran desde primera hora de la tarde, el viernes, y desde media mañana, ayer sábado. Aquí la reflexión electoral se ha llevado a las calles, realmente ajenas a la batalla del 2-D, más preocupadas en asuntos más terrenales, aunque sin perder de vista lo que de verdad importa.

Campaña solidaria

Recogida de alimentos en un supermercado.

En los supermercados, animados siempre en sábado, han vivido una gran movilización por la campaña del Banco de Alimentos de Huelva en su tradicional Gran Recogida. Solidaridad habitual en estas fechas de sensibilidad a flor de piel para animar a los más perezosos, que no viene mal un empujoncito cuando de conseguir ayuda se trata.

Es como ese gran homenaje en la Casa Colón a Joaquín Martín Jiménez Quini, para entrar en calor por la noche al compás flamenco y el ritmo de jazz, animados por la celebración a quien tanto hizo por los demás y que ahora sigue entregándose desde otra dimensión a beneficio de su querida Fundación Valdocco.

Si las elecciones andaluzas tuvieran un mecanismo más popular, movido por la presencia en la calle, Huelva tendría hoy una participación histórica, rozando el pleno técnico que sólo se ve en los días señalados de Semana Santa o en el culmen navideño de final de mes.

Es tiempo de celebración y calle, aunque lejos quede la primavera. Y eso alegrará el consumo, el comercio, la hostelería, los bolsillos de todos... una época fuerte, de efervescencia, acaba de empezar y sólo queda disfrutar.