Santiago del Valle, el presunto asesino de la niña onubense Mari Luz Cortés, ha declarado hoy en el juzgado de instrucción número 2 de Sevilla por enganchar su vivienda a la red eléctrica de forma ilegal cuando vivía en la capital hispalense en 2006.

Fuentes judiciales han explicado que Del Valle se han enfrentado hoy a un juicio de faltas que le interpuso Sevillana-Endesa por este motivo, sin que las fuentes consultadas hayan aclarado cuál ha sido el resultado de la vista, celebrada en forma de "juicio de faltas".

El presunto asesino de Mari Luz ha salido escoltado de los juzgados poco antes del mediodía, y ha vuelto al Centro Penitenciario de Villabona (Asturias), donde cumple condena de dos años y seis meses de prisión por sendos delitos de abuso sexual con reincidencia y coacciones a una menor.

Del Valle vivía en la barriada del Torrejón de Huelva desde principios de los 90, aunque se marchó de la misma en 2004, y en ese periodo de tiempo vivió en Gijón y Sevilla, y volvió a la capital onubense meses antes de la muerte de Mari Luz el pasado enero.