La exposición itinerante La victoria de la libertad: la Policía Nacional contra el terrorismo ya ha abierto sus puertas a los onubenses. Desde ayer se puede visitar en la Sala de la Provincia de la Diputación de Huelva, en la Gran Vía de la capital, y ofrece al visitante una panorámica integral del esfuerzo de los agentes del Cuerpo Nacional de Policía para combatir a aquellos que se han afanado (caso de ETA y el Grapo) o se siguen empeñando (caso de los yihadistas) en sembrar el terror entre la población civil.

En ella se pueden ver desde los detonadores a las ollas intervenidas a la banda etarra, la metralla que utilizaban para multiplicar el daño de sus ataques indiscriminados, multitud de banderas, apuntes sobre cómo fabricar una bomba o las pistolas y fusiles que se les intervinieron antes de que formalizara su reciente disolución. Destacan los trajes de los artificieros y el robot para desactivar explosivos de los Tédax, además del arma larga con la que Kantauri y Txapote pretendían asesinar al rey Juan Carlos I en agosto de 1995.

Armas, detonadores, metralla o placas de matrícula forman parte de la muestra

El arsenal expuesto es sobrecogedor y da una idea, a modo de pincelada, de la envergadura de las bandas a las que han plantado cara las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en los últimos años. Los visitantes también podrán ver, por ejemplo, un subfusil recuperado en el madrileño piso de Leganés donde se suicidaron los yihadistas que llevaron a efecto la masacre del 11-M.

Varias paradas audiovisuales en el recorrido permiten al espectador detenerse a escuchar las voces de las víctimas, a recordar los atentados y las operaciones policiales más célebres. Los paneles informativos hacen el resto.

En la inauguración de la muestra, que ha pasado ya por varias capitales andaluzas y por la sede del Parlamento Europeo de Estrasburgo, las víctimas y sus familias fueron las protagonistas. Sólo en el Cuerpo Nacional de Policía son 188 los agentes asesinados por terroristas, 49 de ellos andaluces y tres, oriundos de la provincia de Huelva. El jefe del Gabinete Técnico de la Dirección General de la Policía Nacional, Juan Manuel Pérez, entregó un obsequio a los familiares de dos de estos policías onubenses: a los padres y la novia de José Manuel Cruz Martín, que fue víctima de la bomba péndulo que ETA colocó en su coche cuando estaba destacado en Barakaldo; y a la viuda y los hijos de José Santana Ramos, natural de Riotinto y "asesinado de dos tiros en la cabeza en un bar al que iban a jugar a las cartas miembros del PNV".

El tercer onubense homenajeado, aunque sus familiares no estuvieron en la ceremonia inaugural de ayer, fue Antonio Mesa, natural de Rosal de la Frontera y "ametrallado en Getxo". La ovación de la sala, en la que se encontraban numerosas autoridades civiles y militares de Huelva, fue atronadora.

Especialmente emotiva fue la intervención que realizó la subdelegada del Gobierno en Huelva, Asunción Grávalos, en el acto inaugural. Agradeció el "compromiso inquebrantable" de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para combatir al terror, pero también narró su historia personal. "Nací en San Sebastián y soy hija y nieta de militares. Mi padre fue objetivo de ETA y, desgraciadamente, sé cómo suenan un coche bomba y los tiros a bocajarro; he sufrido el desprecio de vecinos por sentirme española".

Por todo, a las 853 víctimas de la barbarie etarra "nunca, jamás os olvidaremos". Grávalos destacó además el oportuno momento en el que la exposición llega a Huelva, con la extinción de la banda recién anunciada. "Ni hubo ni habrá impunidad para ETA", sentenció.

El presidente de la Diputación de Huelva, Ignacio Caraballo, señaló que la muestra es "rigurosa, divulgativa y necesaria", por lo que anima a los onubenses a visitarla. Se podrá ver hasta el 19 de mayo, de lunes a viernes, de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 21:00. Y los sábados de 10:00 a 14:00.