Juan José Cortés, el padre de Mari Luz , la niña desaparecida el pasado 13 de enero en la barriada de El Torrejón de la capital onubense, identificó ayer, poco antes de las 22.00 horas, el cadáver de su hija, confirmándolo instantes más tarde ante los periodistas que se habían apostado en la puerta del tanatorio un amigo de la familia, José Saavedra, quien informó además de que la madre, Irene Suárez, no se ha atrevido siquiera a entrar y ver el cadáver de la pequeña.

Según preció Saavedra, Juan José Cortés explicó, tras constatar que el cuerpo era el de su hija, que "presenta un golpe en la cabeza". Asimismo, manifestó que la familia se encuentra "destrozada" porque "todos pensábamos que íbamos a encontrar a la niña con vida".

Por último, indicó que los vecinos de El Torrejón, la barriada en la que reside la familia Cortés-Suárez, tiene previsto realizar una concentración en repulsa por lo ocurrido, si bien, por lo reciente de los acontecimientos, aún no ha podido precisar la fecha en la que se celebrará.

La familia de Mari Luz Cortés, la niña desaparecida hace casi dos meses y cuyo cuerpo fue hallado en la tarde de hoy flotando en el mar, todo ello a la espera de que se le realicen la autopsia y las pruebas científicas correspondientes a su identificación definitiva, pidió ayer vivir "con tranquilidad y en la intimidad" unos momentos "tan amargos".

El portavoz de la familia, Luis Molina, atendió a los numerosos medios de comunicación que cubrían la información en las inmediaciones del tanatorio del Atlántico de Huelva (más conocido como el tanatorio nuevo) y aseguró que la familia "está viviendo unos momentos muy trágicos y unas escenas muy fuertes", así como que "todo el mundo está muy destrozado y muy mal".

En este sentido, Luis Molina indicó que fue sobre las siete de la tarde cuando la Policía Nacional le informó del asunto, por lo que pudo anunciar que el cadáver hallado en el mar "es al 99 por ciento nuestra pequeña Mari Luz, a falta de que el forense le realice la autopsia".

En las inmediaciones del tanatorio hay concentradas más de 100 personas, además de medio centenar de medios de comunicación, que en un principio no pudieron acceder al tanatorio por el fuerte cordón policial establecido, aunque finalmente se lo han saltado, registrándose en estos momentos más de 200 personas agolpadas en las puertas del tanatorio.