Andalucía cuenta en este curso escolar 22-23 con 746 aulas más que el curso anterior en la red de centros públicos. En total son 54.637 clases distribuidas entre todas las etapas y enseñanzas, frente a las 53.891 del curso 21-22. El crecimiento se produce en todas las provincias andaluzas, con un aumento de 122 en Almería, 69 en Cádiz, 46 en Córdoba, 91 en Granada, 69 en Huelva, 32 en Jaén, 153 en Málaga y 164 en Sevilla. En el curso 21-22 el crecimiento del número de aulas respecto a 2018 era de 394, por lo que la cifra se eleva a 1.140 más en cuatro años.

El mayor crecimiento corresponde a las unidades de Formación Profesional, con 371 aulas más, y de Educación Especial, con 283 clases más, dos de los ejes estratégicos de la Consejería de Desarrollo Educativo y FP, mientras que en las etapas de infantil y primaria, las más afectadas por el drástico descenso de la natalidad, y que contabilizan casi 10.000 alumnos menos en los centros públicos en este curso, el cómputo es de solo cuatro aulas menos, como así refleja la orden jurídica de composición jurídica publicada por la Consejería en el Boletín Oficial de la Junta de Andalucía (BOJA), y que se ciñe solo a estas dos etapas educativas con centros de titularidad de otras administraciones, lo que ha permitido mejorar en medio punto respecto al curso pasado las ratios medias de alumnos por aula (19,24 Infantil y 20,28 Primaria), las más bajas del histórico en Andalucía (los límites máximos establecidos por el Gobierno central es de 25 alumnos). En el curso 2017-18 esas ratios se situaban en 20,72 en los centros públicos de infantil y de 21,58 en Primaria.

En este curso 22-23, la Consejería de Desarrollo Educativo y FP ha reforzado la atención en las etapas de infantil y primaria, pese a ese descenso de alumnado, con casi 900 docentes más, correspondiente a los cupos de refuerzo extraordinario que se mantienen.