La Guardia Civil celebró ayer su día grande, el de su Patrona -la Virgen del Pilar- y el de la Hispanidad, un 12 de octubre muy especial que se inició con una misa en la catedral de La Merced y que tuvo su acto central en la Plaza de las Constitución, donde cientos de ciudadanos arroparon con su presencia y sus aplausos a los ángeles de verde.

Alrededor de 140 efectivos del Cuerpo formaron parte de la ceremonia. Aunque el cielo derramó algunas gotas, respetó el acto y el sol llegó a mostrar todo su esplendor en el corazón de la capital.

El coronel jefe de la Comandancia de la Guardia Civil de Huelva, Ezequiel Romero, pasó revista a los agentes desplegados ante la casa consistorial onubense. Lo hizo manteniendo la compostura pese a la emoción, puesto que esta será la última vez que presida el 12 de octubre (se jubilará al inicio de 2019).

Llegó el momento de las condecoraciones. Un total de 57 efectivos -30 agentes, nueve cabos, nueve sargentos, dos brigadas, tres tenientes y cuatro capitanes- recibieron la Cruz al Mérito con distintivo blanco o las encomiendas de la Orden de San Hermenegildo, entre otros reconocimientos. Todos han protagonizado servicios extraordinarios o sobresalen por su trayectoria profesional en el Cuerpo.

Ya fuera de él, el Instituto Armado quiso reconocer con la Orden del Mérito de la Guardia Civil con distintivo blanco al superintendente jefe de la Policía Local de Huelva, Rafael Mora, "por su colaboración y aprecio a la institución benemérita". El premiado y el coronel se fundieron en un afectivo abrazo tras la entrega de la prestigiosa distinción. "Que esta condecoración sea un puente que haga todavía más sólida la colaboración entre las policías locales y la Guardia Civil", enfatizó Romero.

Otras siete personas recibieron menciones honoríficas que ponen de relieve "su estrecha colaboración y cooperación, el aprecio mostrado a esta institución y el compromiso adquirido con ella, redundando en la efectividad" de los servicios. Los protagonistas homenajeados fueron la directora de Comunicación de Atlantic Copper, Esperanza Morillo; la secretaria coordinadora de Huelva, Aurora Marín; el policía portugués Samuel José de Carvalho o el torero triguereño David de Miranda, así como Antonio Carbonell, José Luis Martínez y Francisca Borrero.

Uno de los instantes más conmovedores de la jornada llegó con el tributo que la Guardia Civil rindió al más veterano de los suyos en Huelva: el agente retirado Manuel Salcedo Espina, quien junto a su esposa Magdalena recibió un aluvión de acalorados aplausos, además de un ramo de flores y un obsequio para el recuerdo.

El primer discurso del acto castrense estuvo protagonizado por el coronel Ezequiel Romero. Felicitó a los casi 1.500 efectivos que conforman la plantilla de la Benemérita en Huelva y evidenció la importancia de una doble efemérides como la de ayer: de un lado, la Fiesta de la Hispanidad, que "recuerda aquel día de 1492, que a las 2 de la madrugada un marinero español, Rodrigo de Triana, tripulante de la carabela Pinta, vio tierra después de 71 días de navegación a través del océano Atlántico, partiendo desde esta parte tan maravillosa del mundo, la provincia de Huelva"; del otro, el día de la Patrona de la Benemérita, "que viene siendo una constante en toda la geografía española desde 1913".

Para Romero, las dos protagonistas del 12 de octubre, "España y la Guardia Civil, están relacionadas; es difícil entender la historia contemporánea de España sin una referencia" a un cuerpo que está entre las instituciones más valoradas por la ciudadanía.

La cabeza visible de la Comandancia onubense subrayó que "somos el único cuerpo policial desplegado en la totalidad del territorio nacional, abarcando a 6.751 municipios del total de 8.120". Además de su presencia en edificios públicos y por tierra, mar y aire en el país, la Benemérita es "una herramienta fundamental exterior", puesto que cada vez es "más importante la cooperación policial internacional para poder defender los intereses de nuestra nación fuera de sus fronteras".

Con el foco puesto en Huelva, el coronel destacó que las infracciones penales han descendido un 3,8% y que el esclarecimiento de delitos rebasa el 49% de los asuntos. Son "datos satisfactorios que nos permiten afirmar que la Comandancia de Huelva cuenta con grandes profesionales". Agradeció la colaboración de instituciones de toda índole y dejó para el final a la Policía Nacional, porque "lejos de protagonismos, conseguimos conformar unas Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado con un potencial de servicio al ciudadano envidiable; la coordinación es muy buena y su consecuencia es la eficacia".

También tuvo palabras para los onubenses, quienes "pueden aportar mucho en seguridad, primero denunciando los hechos" y luego en la labor preventiva. Tras reseñar los servicios de auxilio realizados en Huelva, mostró su agradecimiento a los miembros de la Unidad de Seguridad Ciudadana de la Comandancia (Usecic), presentes esta vez en el desfile. El año pasado no pudieron estar "por ser necesarios en sus servicios en Cataluña; transmitiros nuestra admiración y orgullo por sentirnos tan brillantemente representados".

El alcalde de Huelva, Gabriel Cruz, felicitó a los presentes en un día tan señalado y a las mujeres de la Benemérita por sus 30 años de presencia en el Cuerpo. Tuvo palabras afectuosas para el jefe de la Policía Local, "un orgullo" para el Ayuntamiento.

Cruz agradeció a los agentes beneméritos que "nos garanticen una vida en paz y digna desde la seguridad y la defensa del orden constitucional". Señaló que el "compañerismo y la familia" son dos de las bases de una festividad como la del Pilar y remarcó que son "muchas las circunstancias que hacen del 12 de octubre un día tan especial", entre ellas que se conmemora el 526 aniversario "de la llegada a América, del encuentro entre dos mundos".

Todavía con muletas dio su primer discurso en el acto castrense de la Guardia Civil la subdelegada del Gobierno en Huelva, Manuela Parralo, quien puso de manifiesto el "indiscutible protagonismo de los hombres y mujeres que conforman el benemérito cuerpo, que dedicáis vuestras vidas a los demás; no sois solo agentes del orden, sino también un reflejo de los principios que suenan en vuestro himno". La sociedad siente "un gran cariño y respeto por vosotros, os lo habéis ganado a pulso con vuestra cercanía y creciente profesionalidad". Algo elogiable "por los retos que cambian con la misma velocidad que la sociedad en que vivimos".

El Instituto Armado ha sabido "adaptarse a las exigencias de nuestro tiempo". El éxito que constatan las cifras, que apuntan a un decrecimiento de la delincuencia, es un reflejo "del trabajo que realizáis; siempre acudís, siempre respondéis a las llamadas de auxilio".

Parralo puso el acento en la labor conjunta del Equipo de Delincuencia Organizada y Antidroga (EDOA) y el Servicio Marítimo para plantar cara al narcotráfico, en la del Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) para preservar el medio ambiente, de la Agrupación de Tráfico para mantener la seguridad en las carreteras o de la Policía Judicial "para averiguar delitos y auxiliar a los ciudadanos".

A ello agregó la ingente labor de la Benemérita en la "prevención y lucha contra la violencia de género, que deja alarmantes cifras y que es una terrible realidad que debemos erradicar". La subdelegada aplaudió la profesionalidad de los agentes de otras unidades y de los participantes en dispositivos especiales. "Hay que destinar más recursos económicos a la Guardia Civil y más efectivos", además de resaltar que la equiparación salarial para ellos "se hará efectiva este mes".

El homenaje a los caídos en acto de servicio puso el detalle de recogimiento al ceremonial. Romero y Parralo depositaron una corona de laurel ante el monolito del Instituto Armado.

Con los sones de la Banda Municipal de Música los presentes entonaron el himno de la Benemérita y escucharon en silencio el de España.

La jornada finalizó con el desfile militar que discurrió por la Gran Vía, desde la Plaza de El Punto a la Plaza de las Monjas, en el que participaron las distintas unidades de la Comandancia de la calle Guadalcanal. En total, 67 efectivos y una veintena de vehículos pusieron el punto y final a la jornada festiva.