En contra de la creencia existente en el colegio Reyes Católicos de que era posible que Educación recepcionase la obra de reforma durante el día de hoy, la delegada Antonia Cascales asegura que la obra "aún no se ha recepcionado, posiblemente se haga la semana que viene pero tenemos que esperar a que vengan los técnicos y evalúen la situación de las nuevas instalaciones del centro".

Por su parte, el Consejo Escolar y la Ampa del centro denuncian algunas anomalías en la terminación de los trabajos y exigen que "todo se termine bien". Según versa en un escrito remitido a este periódico, la Ampa manifiesta su indignación porque "la obra no ha sido gestionada ni controlada por las instituciones oportunas". Más de un millón de euros ha sido el montante que la Consejería de Educación ha destinado a la realización de esta gran reforma. Son muchas las anomalías que, tanto los padres como el Consejo Escolar, aseguran haber detectado. Destacan el estado de las escaleras de seguridad como un error "de máxima importancia" ya que, según denuncian, incumple lo dispuesto en la legislación vigente por lo que temen que ahora tampoco se permita su utilización.

De otra parte, las pistas deportivas han sido el espacio más maltratado por los trabajos de reforma por lo que ahora exigen que las pinten pero, según aseguran desde el centro "esto no se ha hecho aún estando reflejado en el proyecto que se ha de pintar". Además, manifiestan también su malestar por el estado de otras partes del centro: denuncian que no se ha arreglado parte del muro que rodea al colegio "existiendo grietas en él", el vallado de la zona de Infantil no se ha sustituido "teniendo zonas con un estado penoso por su antigüedad y se prevé que se va a parchear", los pilares de las escaleras de seguridad no se protegen "con el peligro que eso conlleva para los niños que allí tienen el recreo", el comedor carece de ventilación y luz natural y algunas otras terminaciones de la obra son lamentables y "con escaso interés de mejora".

Antonia Cascales se ha referido a todas estas denuncias y ha admitido que "el comedor necesita ventilación y luz. Yo hablaré con el Ente y eso lógicamente se va hacer independientemente de que esté en el proyecto o no porque es necesario". En su visita al colegio en la mañana de ayer, la delegada se comprometió con los padres y con la dirección del centro a que todos los problemas se van a solucionar. Cascales ha querido tranquilizar los ánimos y ha declarado que "el proyecto hay que ejecutarlo y luego, si queda algo importante que hacer, se hará aunque la obra se recepcione".

Los trabajos del colegio Reyes Católicos comenzaron en junio del año pasado y, en principio, el proyecto fijaba la terminación de la reforma de la parte interior del colegio en septiembre, antes de que los alumnos comenzaran el curso. Por esta razón, los colegiales terminaron el curso pasado algunos días antes y el presente lo comenzaron unas jornadas después. Pero tal y como aseguran fuentes del colegio, esto no ha sido así ya que las obras de reforma del interior del edificio "acaban de terminar", con cinco meses de retraso. En el caso de los trabajos en el exterior del colegio, el plazo para su terminación era febrero, un compromiso que sí han cumplido pero, tal y como precisan desde el centro "todo se ha terminado mal".