Una serie de robos cometidos en varias localidades de la provincia de Huelva, entre ellas Almonte, Bollullos o Hinojos disparó las alarmas; la presencia de esa misma marca de todoterrenos en las playas de Isla Cristina en los meses de febrero y mayo confirmó la presencia de una red organizada de robo de este tipo de vehículos para venderlos posteriormente a personas que los utilizaban en operaciones de tráfico de drogas en las playas tanto onubenses, como de las costas de Cádiz. Ayer se cerró una operación que llevaba abierta desde el mes de octubre del año pasado y que se saldó con la detención de tres personas y la apertura de investigación a otras dos, como implicados en los hechos.

La operación, según pudo conocer Huelva Información, se abrió como consecuencia de ese alto índice de robos que afectaba a otras provincias como Sevilla y Madrid. El modus operandi comenzaba por el interés en comprar un vehículo de segunda mano, por lo que concertaban una cita con el propietario del mismo. Una vez delante del automóvil les atosigaban con preguntas sobre sus características hasta darse incluso el caso de hacerles abrir el maletero, momento que aprovecharon para huir con el vehículo.

Una vez robados, según la investigación llevada a cabo por los agentes de la Guardia Civil, eran vendidos en el mercado negro a organizaciones relacionadas con el tráfico de drogas. En los interceptados en las mismas, al cotejar sus números de bastidor se pudo comprobar que eran los mismos que habían sido robados en la provincia de Huelva. Otros, sin embargo, eran empleados para el robo de otros vehículos e incluso se han llegado a implicar en operaciones de alunizaje en comercios.

Las investigaciones han servido para esclarecer el robo de hasta 21 vehículos, de los cuales once fueron recuperados en diferentes circunstancias, en su mayoría en alijos de hachís en diferentes puntos de la costa andaluza.

Algunos de los operativos llevados a cabo tuvieron lugar en naves industriales en las que se localizaron vehículos con matrículas dobladas, preparados supuestamente para la recogida de droga en la costa; otro vehículo fue encontrado calcinado en un supuesto vuelco (robo entre narcotraficantes) y en el mes de febrero en Cádiz se recuperó un todoterreno tras la colisión con un vehículo oficial en la que resultaron heridos dos guardias civiles que hacían labores de vigilancia.

Los implicados en los hechos tenían un alto grado de coordinación y usaban para comunicarse teléfonos móviles a nombre de fallecidos y terceras personas ajenas a la organización. Los detenidos junto con las diligencias instruidas han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de La Palma del Condado, que ha coordinado las actuaciones. Actualmente uno de los investigados se encuentra en prisión por otros delitos.