El Grupo Decal, uno de los principales operadores del Puerto de Huelva, alcanzó un acuerdo con la Asociación Protectora de Personas con Discapacidad Intelectual (Aspromin) por la que la primera se compromete a aportar una cantidad de 40.000 euros anuales para financiar las actividades de la entidad que supondrá una ampliación de las actividades que realiza en favor de 260 niños en atención privada a la que presta su ayuda en Huelva. El presidente de Decal, Gian Luigi Triboldi y el gerente de Aspromin, José Manuel Moreno, suscribieron en la mañana de ayer el convenio de colaboración que, con una vigencia de cuatro años, llega "con vocación de permanencia".

Así lo reconoció Triboldi, quien reconoció el "compromiso social de la empresa, su colaboración con personas que ayudan a quienes más lo necesitan, dentro de una responsabilidad social que tenemos asumida desde que llegamos a Huelva en 1995". Para Decal "se trata de devolver a la sociedad una parte de lo que nos ha entregado a lo largo de todos estos años; es nuestra obligación real". El responsable de la empresa italiana, recordó las actividades en el entorno de la Responsabilidad Social Corporativa que llevan a cabo en todos los lugares donde están presente, desde Barcelona a Huelva, pasando por países como Panamá y Brasil.

La ayuda se prolonga durante un periodo de 4 años "con vocación de permanencia"

Por su parte, José Manuel Moreno, quiso "agradecer la colaboración que ha mantenido Decal con nosotros desde un principio; somos una entidad que tiene más de 50 años, en los que nos nutrimos de ayudas públicas para dar servicio tanto a 150 personas en la comarca de Riotinto, como a 260 niños en Huelva en programas de asistencia temprana". Para ellos, la ayuda recibida es fundamental, ya que "pese a que el mantenimiento de la actividad está garantizado, sí tenemos problemas en cuanto a la innovación o a la adquisición de nuevos equipos; hay que tener en cuenta que, por ejemplo, una sala de fisioterapia para estos niños cuesta cerca de 30.000 euros y eso supone ofrecerles un mayor número de sesiones y ayudarles de una manera más importante, o conseguir que fueran más niños los beneficiados por las actividades".

Dentro de esta política, Decal organizó en la tarde de ayer en la Casa Colón un concierto que unió sobre sus tablas al primer trompeta de la Orquesta del Teatro de la Ópera de Roma y concertista internacional, Mauro Maur, y a la reconocida pianista Françoise de Clossey, quienes interpretaron varias piezas míticas de dos de los grandes nombres de las bandas sonoras del cine italiano como son Ennio Morricone y Nino Rota.