Cuando todo acabe habrá quien eche de menos esos ratos en los balcones. Se han convertido en una sana rutina con la que los onubenses han encontrado una forma diferente de relacionarse e incluso de conocer a quienes viven a su lado.

Es Martes Santo y hoy debía haber pasos y miles de onubenses por las calles. En su lugar y para cubrir aunque sea mínimamente el vacío que deja en los cofrades, las marchas suenan por donde debían salir las procesiones como en la calle presbítero Manuel López Vega, donde tenía que haber salido La Lanzada.

En otros puntos como Pablo Rada el ambiente es mucho más festivo y la música convierte los balcones y ventanas en auténticas pistas de baile. Además el buen tiempo ya compaña y el sol en la cara invitar a sumarse con ganas.

Para quienes no hay descanso hay aplausos. Las ambulancias y la policía desfilaron por la Fábrica de Harina, donde se llevaron el cariñoso reconocimiento de los onubenses.

Y es que Huelva, como demuestra Las Colonias, siente una profunda admiración por lo que están luchando todos los profesionales que están en primera línea de la lucha contra el coronavirus.