El Juzgado de lo Penal 2 de Huelva ha condenado al responsable de una empresa de trabajos agrícolas a un año de cárcel y al pago de una indemnización de más de 583.000 euros a una persona a la que contrató verbalmente, sin darla de alta en la Seguridad Social, y que quedó atrapada en la draga de un tractor.

La sentencia, a la que ha tenido acceso Efe, considera a esta persona responsable de un delito contra los derechos de los trabajadores y le impone, además de la pena de cárcel, inhabilitación especial para ejercicio de la profesión de empresario agrícola durante el tiempo de condena y pago de las costas.

Se acuerda la suspensión por dos años de la ejecución de la pena privativa de libertad impuesta, condicionada a no delinquir durante el período y a abonar la indemnización establecida, que se ha fijado en 583.951 euros.

Se considera probado que en febrero de 2014 el representante legal de una empresa dedicada a actividades agrícolas concertó con el propietario de una finca de Gibraleón la realización de unos trabajos de desbroce, mantenimiento y limpieza.

Para la ejecución de las labores concertadas, el acusado contrató verbalmente, entre otros, a un hombre, a quien proporcionó un tractor agrícola de cadenas, y como apero una grada que se le acoplaba, sin que procediera a darle de alta en la Seguridad Social.

El 8 de marzo del 2014, sobre las 11:00, el trabajador se encontraba en la referida finca y, siguiendo las órdenes del acusado, comenzó a arar el terreno con el tractor.

Al llegar a una zona de suelo irregular con un desnivel y cuando se dispuso a descender por el mismo, el tractor se inclinó, volcó y el trabajador salió despedido, cayendo al suelo, de modo que la grada del tractor le pasó por encima y lo atrapó. El tractor carecía, incluso, de cinturón de seguridad.