La concejala de Hábitat Urbano e Infraestructura del Ayuntamiento de Huelva, Esther Cumbrera, ha destacado “la importancia del incremento del uso de agua y jabón para llevar a cabo una limpieza en profundidad de las calles, porque no basta con recoger papeles, colillas y excrementos y después barrer en seco; si queremos acabar con la suciedad adherida y mantener los acerados y espacios peatonales en un buen estado, es preciso fregar”. De esta forma, la edil se ha referido al refuerzo de los servicios de cisternas y baldeadoras incluidos en el plan de acción de mejora de la limpieza en la ciudad puesto en marcha por el Ayuntamiento de Huelva, a finales del pasado mes de septiembre.

Cumbrera ha recordado que “ya en este año y como consecuencia de la pandemia, la empresa de limpieza ha venido utilizando desde finales de marzo un 74% más de agua con productos antisépticos para la limpieza de la vía pública respecto a los servicios ordinarios que se prestaban antes de la crisis sanitaria” calculando “una cifra aproximada de 188.000 litros de agua con desinfectante al día”. Sin embargo, la concejala apunta que “además de desinfectar, hay suciedad que sólo se quita con agua y jabón, como el polvo, excrementos de mascotas, grasas de diversos orígenes, manchas provocadas por la floración de los árboles, manchas en los alrededores de los contenedores, chicles, ceras y pringues que estamos dispuestos a eliminar con una limpieza a fondo y de choque”.

Para ello, se ha reforzado el servicio de baldeo con cisterna en 350 jornadas al año, ampliándolo en un equipo más de lunes a sábado en turno de mañana y tres equipos más los sábados por la noche, igualando así al resto de días de la semana. Además, en cuanto al baldeo de aceras con agua caliente, se ha incrementado en un equipo más, tanto el turno de mañana, como el de tarde, de lunes a sábado. Un refuerzo de medios mecánicos que se aplica manteniendo operativa toda la maquinaria disponible en la actualidad. En concreto el Servicio de Limpieza de Huelva cuenta actualmente con 12 máquinas con capacidad para la limpieza con agua y jabón, concretamente seis camiones cisternas, tres baldeadoras, dos fregadoras y una hidrolimpiadora de alta presión.

El incremento del uso de agua se está centrando en los pasajes, plazas y aceras utilizando además de las cisternas, las llamadas baldeadoras y fregadoras para cubrir zonas inaccesibles de otro modo, ya que son vehículos de menor tamaño, equipados con bombas de agua de alta presión, tanto fría como caliente.