La localidad de Benavente en Zamora ha sido la primera parada de la ruta gastronómica ‘ADN Huelva’. Una iniciativa de promoción turística a través de la gastronomía, promovida por el Ayuntamiento de Huelva, la Diputación y Xanty Elías, que fue presentada el pasado mes de enero en Fitur y que ha conseguido colgar el cartel de completo en el restaurante El Ermitaño, con una estrella Michelin.

Más de 65 comensales han disfrutado de una cena muy especial realizada a seis manos entre los chefs Pedro Mario, Óscar Manuel y el onubense Xanty Elías.Una experiencia gastronómica única con sello ‘100% Huelva’, en la que los comensales han podido conocer, a través de sabores únicos y la maestría de los mejores cocineros con estrella, las entrañas de la provincia.

Para ello, los asistentes han degustado un elaborado menú inspirado en los productos insignia de Huelva. La gamba blanca de la costa, el jamón DOP Jabugo, las carnes ibéricas, el garbanzo IGP de Escacena, los frutos rojos o los vinos del condado onubense han sido los protagonistas.“Huelva es una enorme despensa agroalimentaria de calidad, cuya variedad y matices hacen posible un recetario cargado de sabor y emociones”, ha explicado Óscar Manuel.

“Estamos muy felices de la gran acogida que ha tenido esta cena. Es una iniciativa que aporta muchos valores al comensal. Despierta el interés por conocer la bella tierra onubense, la provocación tremendamente generosa para que descubra los aromas, sabores y rincones de una zona de España que merece la pena”, ha destacado.

Para Pedro Mario, estar en los fogones junto al promotor de ADN Huelva ha sido muy gratificante. “Un lujo cocinar con un amigo. Pero es más, un auténtico placer hacerlo con uno de los mejores cocineros de nuestro país. Xanty Elías cocina lo que es, cocina su querida Huelva”.

Por su parte, Xanty Elías ha asegurado que inaugurar este recorrido culinario por España de la mano de El Ermitaño ha sido una decisión acertada para comenzar con buen pie: “La energía que emana de El Ermitaño y todo ese aura religioso que tiene dentro, incluso, de la ermita del restaurante, ha hecho que empecemos disfrutando como auténticos niños, como siempre pasa en este rincón tan especial de Castilla y León”.