Las casas de apuestas británicas apuntan, contra todo pronóstico, a un posible embarazo de la duquesa de Cambridge, cuando su hijo pequeño, Luis, aún no ha cumplido ni su primer año de vida (lo hará el próximo mes de abril). Las alarmas se han disparado por el hecho de que la esposa de Guillermo de Inglaterra haya rescatado recientemente de su fondo de armario para un acto oficial un abrigo premamá azul. De ser cierta la noticia, sería el cuarto hijo para los duques de Cambridge, que ya tienen a Luis, de nueve meses; Carlota, de tres años, y Jorge, que tiene actualmente cinco. Además, se produciría un auténtico baby boom en la casa real inglesa pues los duques de Sussex también esperan un hijo para el mes que viene.

La duquesa, con el abrigo azul premamá que rescató recientemente.

La cigüeña parece tener trabajo de sobra en el clan Windsor. Y es que no sería de extrañar que la princesa Eugenia, quien contrajo matrimonio con Jake Brooksbank hace tres meses, diera una buena nueva también próximamente.La noticia del nuevo embarazo de la princesa Catalina corre como la pólvora entre los tabloides ingleses después de un súbito e inesperado aumento de envites entre las casas de apuestas anglosajonas, que aseguran que la duquesa de Cambridge daría este 2019 la noticia de un cuarto embarazo. De hecho, la seguridad es tanta que la cuota de probabilidad a día de hoy se ha reducido a 2/1. Así lo comunicaba el responsable de la famosa web de apuestas Bookmakers al diario sensacionalista The Sun: "Las posibilidades de que Catalina y Guillermo compartan esta buena noticia se han disparado entre los jugadores durante las últimas semanas. Y de ser cierto, nos prepararíamos para el mayor frenesí de apuestas reales de todos los tiempos".

Los duques de Cambridge, en su felicitación navideña de este año.

Si a este repentino y, dicho sea de paso, todavía infundado fenómeno se le suma el abrigo arreglado de premamá que Catalina recuperó la semana pasada para acudir a un servicio religioso, las sospechas no hacen sino incrementarse. De igual modo, unas escuetas palabras de Meghan Markle durante la pasada Navidad diciendo "el bebé casi está aquí" dispararon las apuestas en torno a un posible parto adelantado, el cual podría tener lugar a finales de febrero, aunque aún no hay nada confirmado tampoco en este sentido.De momento sólo queda esperar a descubrir si finalmente los duques de Cambridge se aventuran a seguir ampliando su ya de por sí familia numerosa. Sabiendo cómo se le complican las cosas a la princesa cuando está embarazada, pronto podrían producirse los primeros indicios. Y es que durante sus anteriores gestaciones, la mujer del príncipe Guillermo sufrió de hiperémesis gravídica. Esta incómoda dolencia conlleva un exceso de náuseas y vómitos que complican el día a día de la embarazada, que se vio obligada en el caso de la duquesa a aparcar algunos de los compromisos oficiales de su agenda durante los primeros meses de embarazo.

La princesa, a la salida del hospital tras tener a su tercer hijo.

De momento y a falta de más pruebas, Kate Middleton celebró el pasado miércoles su 37 cumpleaños con una tea party, es decir, una familiar fiesta con tarta y velas incluidas. Ella quería una celebración íntima y hogareña, y así fue. Según varios medios británicos, Catalina disfrutó de una fiesta de té con pastas a la que no faltaron sus tres hijos ni su marido, el príncipe Guillermo. Kensington Palace agradeció las felicitaciones recibidas por el cumpleaños de la princesa a través de un tuit en el que se leía: "Gracias a todos por vuestros encantadores mensajes en el cumpleaños de Su Alteza Real la duquesa de Cambridge", junto a un primer plano de la homenajeada.