Ben Affleck y Jennifer Garner han llegado a un acuerdo de divorcio que presentarán en los tribunales cuando el actor complete su tratamiento de rehabilitación. La pareja, que no firmó ningún contrato prenupcial antes de su boda en 2005, ha tenido que ponerse de acuerdo en cuanto a las propiedades y sus ganancias, que se repartirán al cincuenta por ciento, y lo que es más importante, sus tres hijos, Violet, (de 12 años), Seraphina (de 9) y Samuel (de 6), cuya custodia, tanto legal como física, será compartida.

La noticia llega varias semanas después de que trascendiera que su proceso de divorcio podría ser anulado por la lentitud de la negociación. El Tribunal Superior de Los Ángeles amenazó con rescindir el caso ya que no habían presentado aún la documentación necesaria y era el tercer aviso que recibía la pareja por parte del juez.

El ex matrimonio firmará los papeles y los presentará ante el juez una vez que el director y protagonista de Argo termine su tratamiento en la clínica de rehabilitación The Canyon, en la que ingresó el pasado día 22.Garner y Affleck anunciaron su separación en 2015 y solicitaron el divorcio en abril de 2017. Desde entonces, ambos actores han mantenido una relación excelente por el bien de sus hijos y no era inusual verles juntos. De hecho, Jennifer Garner fue la persona que le condujo hasta el centro de rehabilitación para que ingresara tras su recaída en el alcohol.

El actor permanecerá ingresado al menos un mes. Al parecer la ruptura de Affleck con Lindsay Shookus fue el detonante para que el intérprete volviera de una manera descontrolada a sus adicciones. Jennifer, que siempre ha sido su gran apoyo pese a su separación en 2015, decidió intervenir después de que el actor viviera unos días desenfrenados junto a la modelo de Playboy Shauna Sexton y fuera fotografiado con cajas de alcohol a la entrada de su residencia de Pacific Palisades en Los Ángeles. El actor y cineasta se ha sometido ya a dos tratamientos de desintoxicación en el pasado -el último el pasado noviembre- y lucha por superar su adicción.