La crisis catalana

El 'viejo' PSOE se revuelve

  • Guerra dice que la figura del relator equipara a España con Yemen y Burkina Faso

  • Emiliano García-Page, Javier Lambán y Soraya Rodríguez también alzan la voz

La ministra de Defensa, Margarita Robles, junto con el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page , durante la firma de un convenio interadministrativo  este miércoles en Guadalajara.

La ministra de Defensa, Margarita Robles, junto con el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page , durante la firma de un convenio interadministrativo este miércoles en Guadalajara. / Pepe Zamora (EFE) (Guadalajara)

La aceptación de un relator en la mesa de partidos sobre Cataluña ha revuelto al llamado viejo PSOE, que rechaza cesiones al independentismo a cambio de su apoyo a los Presupuestos en el Congreso.

A la cabeza de la revuelta se ha situado el ex vicepresidente del Gobierno Alfonso Guerra, que ha calificado este miércoles de "desatino" la propuesta para mediar con el Govern. A su juicio, tal propuesta equivale a equiparar a España con países como Yemen o Burkina Faso y apeló a "mantener la dignidad de una nación".

Guerra hizo estas declaraciones durante la presentación en el Congreso de su libro La España en la que creo, que ha escrito "en defensa de la Constitución" en un momento en el que cree que, frente a la "panoplia de zapadores" de la Carta Magna, los firmes partidarios de la libertad, la democracia y el progreso "se encuentran amilanados, asustados e incapaces" de defenderla.

"Aprobar un presupuesto no justifica cesiones que pongan en cuestión la Constitución, la unidad de España, el estado de derecho ni la decencia. Estoy seguro de que @sanchezcastejon no cederá a chantajes de los independentistas, cáncer de la democracia con el que hay que acabar", denunció el presidente de Aragón, Javier Lambán, en su cuenta de Twitter.

García-Page se declara"perplejo"

También levantó la voz el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, para decir que el "modelo" de diálogo que propone el Gobierno le deja "muy perplejo", porque "si de lo que se trata es de tener a alguien de testigo, porque no se fían unos de otros, para eso pueden hablar directamente en el Parlamento, que estamos todos los españoles de testigo y tengo tanto interés como nadie en saber lo que dicen".

La ex portavoz del PSOE en el Congreso y diputada por Valladolid, Soraya Rodríguez, respaldó la petición de García-Page.

En una posición más templada y críptica se situó, vía Twitter, el presidente extremeño Guillermo Fernández Vara: "Las cosas que son difíciles de explicar son aún más difíciles de entender. Sobre todo si no se escucha. Y en España por desgracia hace años que se dejó de conjugar el verbo escuchar".

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