El presidente del PNV, Íñigo Urkullu, aseguró ayer que su partido no trabaja en ninguna propuesta sobre pacificación y denunció que "hay quienes utilizan la lucha contra el terrorismo como arma arrojadiza".

En un comunicado, Urkullu se refirió, de esta forma, a informaciones aparecidas ayer en varios medios de comunicación en las que se afirma que el PNV trabaja en un acuerdo de paz en Euskadi con el objetivo de pactar un decálogo que incluya cómo actuar tras el final de ETA.

Tras insistir en que el PNV "no está trabajando en ningún texto, ni en ninguna propuesta a presentar a los partidos políticos sobre pacificación", Urkullu apostó por un proceso "sin prisa, participativo, sin buscar el rédito electoral" y por "un diálogo sincero, alejado de la presión de los focos y de las cámaras, que no busque la verdad absoluta, ni el desiderátum último de unos u otros, desde el compromiso a nuestras señas de identidad como pueblo".

El presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, pidió ayer por su parte al PNV que "colabore y ayude a la derrota de ETA" y denunció que "en lugar de ayudar a la derrota del terrorismo y de arrimar el hombro en la deslegitimación de ETA, manda mensajes sobre abrir puertas y enseñar esperanzas a una gente que sigue estando donde ha estado siempre".