Pionero en la recuperación de datos, Manuel Huerta de la Morena (Madrid, 1973) atesora una larga trayectoria como experto en ciberseguridad y forense en ciberdelitos. Es CEO de Lazarus Technolgy, una de las empresas más reputadas en ciberriesgo. El último paso que ha dado como empresario es cofundar junto a socios andaluces –el abogado José María Calero y el periodista Francisco Romacho– E-in Digital, empresa especializada en aplicar la ciberseguridad a la reputación digital, con respuestas tecnológicas, jurídicas y de comunicación.

–¿El usuario es consciente de su reputación digital y de que puede perder el control sobre ella?

–El usuario adopta muy rápido la tecnología, pero no la comprende. Muchas veces no conoce el alcance y la repercusión de lo que hace. Muchas veces no se da cuenta hasta que tiene un problema. Sí que es cierto que la situación creada por el Covid-19 ha concienciado muchísimo al usuario sobre la importancia que tiene lo que se hace en las redes.

–Pero al mismo tiempo se han abierto más grietas en el ámbito profesional por la adopción acelerada del teletrabajo, ¿no?

–Claro. Lo que ha pasado es que el escenario de la ciberseguridad se ha dispersado. Se han abierto más grietas. En esa expansión rápida del teletrabajo a muchas empresas no les ha dado tiempo a preparar correctamente los equipos y las infraestructuras y securizarlo todo como en el entorno empresarial. Han aumentado mucho con la situación del Covid-19 las ciberamenazas, que se han multiplicado respecto a la situación anterior, porque se pueden camuflar con el aumento de mensajes o los bulos. Con tanta información moviéndose es más fácil encapsular esas amenazas. A nivel reputacional, nos estamos exponiendo más con opiniones menos meditadas por el calentón de estar encerrados en casa.

–¿Por qué es distinta E-in digital, la empresa que ha fundado con socios andaluces?

–No es que sea diferente, es que no existe una compañía que dé las tres respuestas –tecnológica, jurídica y de comunicación– y esté centrada en el control reputacional y sus ciberriesgos para de personas, empresas o entidades. Existían despachos jurídicos especializados, pero las tres patas en una misma compañía no sabemos que exista otra.

–¿Y el control se hace con una solución tecnológica?

–Sí. Tenemos una herramienta respaldada por el mayor laboratorio en recuperación de datos de Europa y el número uno en ciberriesgos.

"Securizar el hogar ahora es muy importante porque pueden ser la puerta de entrada a empresas seguras"

–E-in Digital ofrece servicios gratuitos de ciberseguridad durante el estado de alarma, ¿qué respuesta ha habido?

–La respuesta ha sido buena. Muchas personas no son conscientes de la utilidad de la herramienta que se les ha ofrecido, porque, aunque ha sido alta, esperábamos más. Realmente, en una situación de descentralización de las empresas, las seguridad que tenemos en los domicilios es la del router y la clave del wifi poco más.  Securizar los hogares ahora es muy importante, porque pueden ser la puerta de entrada a una compañía que sí era muy segura desde antes del Covid-19.

–¿La reputación digital es para quien tiene un perfil público o afecta a todos?

–No. Es para cualquier persona, empresas, marcas. Por ejemplo, cualquiera puede perder un empleo por una payasada que hiciese de adolescente, porque los departamentos de recursos humanos los primero que miran son las redes sociales del candidato.

–¿Cuando se recibe un ataque a la reputación digital se puede hacer algo para responder tecnológicamente?

–Sí. Lo primero es medir el daño e identificarlo. Existen parámetros para poder pedir la retirada de ese contenido y eso muchas veces exige una intervención legal porque en cada red los requisitos son distintos.

–¿Pero el afectado puede retirar un contenido?

–Puede solicitarlo y lograrlo. Aunque no es sencillo, en muchos casos se consigue.

–¿Y si no se consigue, puede minimizarse?

–Claro, si logras que no esté visible minimizas el daño reputacional. Puedes hundirlo en las búsquedas. A la página 8 de Google no llega nadie.

–¿Eso es legal?

–Sí claro. Es tan legal como hacer cosas para que una cosa esté visible en la primera página. Intervenimos en la relevancia de la búsqueda.

–¿Entonces igual que hay contraespionaje hay contraseo?

–Eso es. La denominación que recibe es blackseo.

–¿Cuál es el perfil tipo de un ciberdelincuente?

–Es muy distinto al perfil que tenemos de delincuente. No es un matón que te intimida para robar. Este tipo de delincuente no sería capaz de robar una bolsa de patatas en un supermercado. Es gente retraída que se da cuenta de que puede delinquir por otros caminos y que sabe que jurisdiccionalmente están más protegidos, primero porque hay que dar con ellos y muchas veces quedan impunes.

–¿Aprenderemos la lección en esta situación en la que la única posibilidad de interactuar ha sido virtual que es un ámbito tan importante de proteger como el patrimonio o la integridad física?

–No me cabe la menor duda. Hace mucho tiempo que el 99% de la información se genera de manera electrónica. En el momento que esa información está  expuesta y afecta a la intimidad. Si ahora atacan más es porque los ciberdelincuentes saben que estamos usando dispositivos no tan protegidos como los de las empresas.