La asamblea general de la Hermandad del Rocío de Huelva rechazo esta noche el proyecto de reforma de la casa de hermandad en la aldea presentado por la junta de gobierno que preside Antonio Sánchez de Piña. Un proyecto de reforma completa de la casa de Huelva en El Real de la aldea, en el que se respetaba la fachada de la misma. El objetivo era adaptarla a las necesidades propias de la hermandad como casa de representación, donde se recibe en El Rocío y durante todo el año a instituciones, hermanos y peregrinos.

“Una demanda que existe para adaptarse a los nuevos tiempos ya que se hace urgente unas obras de adaptación a nuevas normas, por lo que se decidió abordar un proyecto integral en la misma”, dice el presidente. Más, cuando ya se dispone de una casa para los hermanos en la Plaza de Doñana, donde se encontraba el llamado Patio de los Damas.

La última reforma en la casa de representación de El Real se hizo en 1979, en la zona interior, quedando la exterior más antigua para albergar al Simpecado y dependencias de mayordomía.

Otras mejoras se realizaron en 2002, cuando se pasa el salón a la planta baja, mientras quedan en la de arriba la zona de dormitorios. A pesar de estas reformas “no ofrece las mejores condiciones para la función que tiene para ser el lugar de recepción de la hermandad”, indica.

Sin embargo, como añade Sánchez de Piña, “ahora lo que se pretendía era hacer una casa para el siglo XXI, que es lo que reclaman los hermanos y, por eso, la junta de gobierno presentó este proyecto. En el mismo no se tocaba la parte de la fachada de El Real protegida por el Ayuntamiento de Almonte”.

Junta de gobierno de la Hermandad de Huelva en la asamblea.

El proyecto contemplaba un cambio en el que solo quedaría en la parte baja los salones, patio y servicios como cocina, almacén y aseos. En la planta alta estarían las dependencias del hermano mayor, mayordomo y, además, se habilitaba espacio para el presidente y el director espiritual, “ya que tienen obligaciones de representación de la propia hermandad y, por ello, se entiende que deben tener aquí sus dependencias y no en una casa particular”, asegura.

La casa de representación sólo dispondría de esas habitaciones y las del servicio, si quedara alguna se pondría a disposición de los hermanos.

“Este proyecto es una necesidad, pues se dispondría de salones y no sólo de patio, en el que ahora cuando empieza a llover es imposible la estancia”, señala.

Esta reforma de la casa no nace exclusivamente de las propias necesidades de la hermandad, sino que además se encuentra reforzada “por el hecho de que gracias a la ubicación que tiene, tan cerca de la ermita, muchos colectivos nos la solicitan para su uso durante el año y tenemos que adaptarnos a la normativa existente”.

Una casa que se tiene que adaptar “al uso para disminuidos físicos y las exigencias propias de la época actual, en la que nos visitan miles de personas a lo largo de la romería”. La vida de ahora en la romería, como señala Sánchez de Piña, “nada tiene que ver con la de los años ochenta del siglo pasado”.El presidente destaca que la idea no es la de un proyecto de la junta de gobierno, sino de hermandad, para el que ya disponían de la tercera parte de los fondos que harían falta y el resto sería a través de la financiación con una entidad bancaria.

Se pretendía ejecutar en ocho meses, desde pasada la romería de 2020, que es cuando se iniciaría, para ser inaugurada en la peregrinación de 2021.El proyecto es del arquitecto Alberto González-Azcona Calviño.

Los hermanos rechazaron el proyecto por 161 votos frente a los 101 que lo apoyaron y 6 fueron en blanco.