El peso de los parados de larga duración (llevan más de un año buscando empleo) ha pasado de representar el 25,5 al 30,7 por ciento del total de desempleados en el segundo trimestre respecto a los tres meses anteriores, de forma que tres de cada diez parados andaluces llevan más de un año en esa situación.

Según el informe de la asociación de grandes empresas de trabajo temporal sobre el mercado laboral Agett, basado en los datos de la Encuesta de Población Activa (EPA), la media nacional de los parados de larga duración sobre el total de personas sin empleo se situó en el segundo trimestre de 2009 en el 26,3 por ciento frente al 23,1 por ciento del trimestre anterior.

La EPA del segundo trimestre de 2009 arrojó en Andalucía un número total de parados que roza el millón, el 25,4 por ciento de la población activa. En cuanto a la evolución de la contratación fija el informe revela que se redujo un 30,1 por ciento en el segundo trimestre de 2009 respecto a los mismos meses de 2007 y la media nacional de reducción fue del 35,7 por ciento.

Por su parte la contratación temporal cayó en Andalucía en los meses analizados un 12,9 por ciento y de media nacional un 17,8 por ciento. Los contratos temporales convertidos en indefinidos suponen en media nacional el 4,3 por ciento y en Andalucía el 2,4 por ciento, es decir, 2,4 contratos eventuales por cada cien pasan a ser fijos. Asimismo, el peso de los contratos temporales sobre la contratación indefinida total supone el 48,3 por ciento en Andalucía y el 40,5 por ciento en España.

El sector de las empresas de trabajo temporal gestionó 402.00 contratos temporales en el segundo semestre en España, el 13 por ciento de los contratos eventuales realizados en esos meses. La penetración de las ETT en Andalucía es muy baja y se sitúa en el 6,1 por ciento frente al 13 por ciento de media nacional.

En las comunidades que presentan una mayor gestión de la contratación temporal tienen tasas de paro y de temporalidad inferiores a la de la media nacional. Por tanto, Agett sostiene que "el sector de las ETT se posiciona como un agente del mercado laboral que regula la tasa de temporalidad y evita que el desempleo sea más elevado".