La facturación de los fabricantes de automóviles en España subió un 1% en 2021 tras superar los 60.900 millones de euros, en un ejercicio aún marcado por las secuelas de la pandemia y la crisis de los microchips, que condicionó el ritmo de producción y matriculación.

El contexto de incertidumbre y cuellos de botella se dejó sentir en el empleo, que cayó a los 61.704 puestos de trabajo, un 12% menos, como consecuencia de la caída del volumen de producción, según el informe anual publicado este miércoles por la patronal Anfac, que destaca la "resiliencia" del sector frente a la situación actual.

Durante el último año, la recaudación fiscal de la automoción se acercó a los 34.150 millones de euros, lo que supuso aumentar en un 15,9 % su aportación a la economía española en comparación con 2020.

De ese importe -y a pesar de la caída del mercado-, el impuesto de matriculación sumó 4.257 millones de euros, un 9,7% más, debido al aumento del gravamen en los seis primeros meses del año por la nueva regulación sobre consumo y emisiones WLTP, relajado temporalmente en el último semestre tras recibir el apoyo del Congreso.

"(La automoción) es una fuente enorme de generación de ingresos públicos. Desde el punto de vista fiscal, es un activo de España", ha dicho el director general de Anfac, José López-Tafall, que ha mostrado su desacuerdo con el sistema de fiscalidad en vigor.

En opinión de la patronal, "es posible mantener buena parte de la recaudación orientando la tributación hacia un modelo más enfocado al uso que a la compra, que es lo que está perjudicando al conjunto del sector".

Por otro lado, el comercio exterior de vehículos se posicionó como el mayor aportador de saldo positivo a la balanza comercial con 18.984 millones de euros en 2021.

Caída de las matriculaciones de hasta el 7%

A preguntas de los periodistas, López-Tafall ha asegurado que, para este año, esperan que las matriculaciones ronden las "800.000 o 830.000, no más", lo que supondría entre un 3% y un 7% menos respecto a las 859.477 unidades registradas durante los doce meses de 2021.

En producción, en cambio, "es difícil ahora mismo por los problemas de suministro de chips. Una semana ves que las fábricas activan un turno y otra, que lo desactivan", ha aclarado.

Sobre esta circunstancia ha incidido durante su intervención, en la que ha recordado que si bien el ejercicio pasado estaba previsto que fuera "el año de la recuperación de la demanda", la ruptura de las cadenas de provisión provocaron una ralentización de las matriculaciones.

De cara al futuro, el director general de Anfac ha optado por no entrar a analizar cómo puede afectar a la industria los nuevos confinamientos en un país proveedor como es China, puesto que "dependerá del grado de aprovisionamiento que las fábricas tengan de los productos" procedentes de allí.

Eso sí, ha reconocido que se maneja como uno de los factores que hace que el "problema de los chips" no se esté solucionando este año, tal y como se preveía.

Retos de futuro

En cualquier caso, López-Tafall cree que los datos de 2021 reflejan la "resiliencia de un sector que aporta el 10% del producto interior bruto (PIB) y del compromiso de la industria y de los centros de producción".

"Los problemas son globales y seguimos siendo un referente", ha incidido antes de recordar que "a finales de año, España era el segundo productor a nivel europeo".

Pero para mantener estas cifras y que el país se convierta en el "hub" de la nueva movilidad, se necesita "un mercado y una producción fuerte", lo que requiere de "recuperar el ritmo natural", con 1,3 millones de turismos matriculados al año y 2,8 millones de vehículos producidos en el territorio.

De lo contrario, se pondrá en riesgo "el empleo y la industria que genera este sector", ha aventurado el director general de Anfac, que ha pedido "el apoyo y la complicidad de la Administración".

En este proceso, la electrificación será clave, por lo que el informe de Anfac urge que se aumente el ritmo de penetración de este tipo de vehículos después de que en 2021 no se cumpliera con el objetivo marcado, y defiende que es necesario duplicar el volumen del año anterior hasta las 120.000 unidades matriculadas.

En paralelo, la patronal ha hecho hincapié en que se impulse la renovación del parque automovilístico, que alcanza los 13,5 años de antigüedad media en España por encima de la europea, en 11,5 años.

Mención especial ha dedicado López-Tafall al futuro impuesto sobre beneficios extraordinarios de las empresas energéticas, las cuales -supone- "no tienen esa capacidad que se les atribuye de traslación inmediata de costes al precio" a pagar por los consumidores.