La Gestión de Fondos en el siglo XXI

La Inversión Socialmente Responsable (ISR) coge ritmo en España

  • Alrededor de un 30% de los inversores españoles tiene en cuenta los principios responsables a la hora de colocar sus fondos y del total de su cartera suelen destinar un 30% siguiendo los criterios medioambientales, sociales y de gobernanza empresarial (ESG).

Cada vez son más los inversores que mueven su cartera con criterios de sostenibilidad.

Cada vez son más los inversores que mueven su cartera con criterios de sostenibilidad.

Son los datos ofrecidos por la gestora Vontobel AM, a partir de una encuesta de de más de 4.600 consumidores de 14 países, entre los que se incluye a España.

Sin embargo, estas cifras podrían ser superiores con mayor información. Y es que, según este informe, el 59% de los inversores desconoce que es posible adoptar un enfoque ISR en la construcción de sus carteras, siendo este porcentaje del 61% en el caso de los inversores con cifras inferiores a los 100.000 dólares.

Además, el desconocimiento conlleva algo de incertidumbre y muchos identifican la ISR con volúmenes altos y sienten temor a que dicha inversión suponga un encarecimiento de los costes.

Para paliar esa falta de información, el 47% de los participantes en el estudio afirman que les gustaría recibir más información de sus intermediarios. En España, solo un 20% declara haber recibido una propuesta de su asesor con respecto a oportunidades ESG.

Otro de los factores a tener en cuenta a la hora de realizar este tipo de inversiones es la rentabilidad. Pues bien, el estudio demuestra que dicho factor no está reñido con los principios de sostenibilidad y un 26% de los encuestados españoles consideran que las compañías que se comportan éticamente tendrán una mayor rentabilidad en el largo plazo.

Áreas de inversión

Asimismo, el estudio de Vontobel AM indica cuáles son las temáticas que más preocupan a los inversores que tienen en cuenta los ESG. El cambio climático y todo lo relacionado con el medio ambiente ocupan el primer lugar en sus preferencias. De hecho, las empresas con mayor probabilidad de atraer a estos inversores son las encargadas de energías renovables, las que llevan a cabo proyectos que respeten el medioambiente y aquellas que promuevan la sostenibilidad.

El medio ambiente es el sector con más éxito entre los inversores socialmente responsables. El medio ambiente es el sector con más éxito entre los inversores socialmente responsables.

El medio ambiente es el sector con más éxito entre los inversores socialmente responsables.

Evolución

En este sentido, el pasado 17 de septiembre se celebró el encuentro ISR de Spainsif, una asociación sin ánimo de lucro constituida para promover la Inversión Sostenible y Responsable en España, donde se informó de que el crecimiento de los activos bajo gestión en inversión temática sostenible es elevado y constante en España, aunque el tamaño del mercado sigue siendo muy pequeño. Entre 2015 y 2017 creció en un 57%, de 98 a 154 millones de euros.

En términos generales, los activos bajo gestión que siguen alguna de las estrategias ISR están experimentando un crecimiento constante en España, desde las primeras mediciones del año 2003.

Tanto es así, que en el estudio de Spainsif sobre ISR en España se demuestra la progresión del mercado de los fondos de inversión con criterios ASG, marcando récords tanto en número de fondos como en patrimonio gestionado.

Por tanto, todo apunta, según los últimos informes, a que el mercado de la inversión sostenible y responsable en España está a las puertas de una nueva etapa de consolidación tanto en volúmenes como en calidad, auspiciado por las iniciativas internacionales, la demanda de los propios inversores y las administraciones.

La ley

Por eso, ya existe numerosa normativa europea que apunta en esta dirección. En marzo de 2018 la Comisión Europea publicó su Plan de acción para financiar el crecimiento sostenible. Esta acción incluye medidas muy completas con el objetivo de reorientar los flujos de capital hacia inversiones sostenibles, gestionar los riesgos financieros derivados de cuestiones ESG como el cambio climático y la degradación ambiental, y fomentar la transparencia y el largo plazo en los mercados de capitales. Esta legislación tiene impactos a lo largo de la cadena de valor de las inversiones, incluidos los propietarios de activos, los gestores de activos, las compañías de seguros, los bancos, los asesores, las agencias de calificación, los proveedores de índices y los emisores.

Por todo ello, entidades como Fundación MAPFRE promueven acciones para difundir el conocimiento de las ISR. En su web Seguros y pensiones para todos trata temas como la relación de las ISR con los ODS o los millennials, su historia o su rentabilidad. Así, señalan que aunque los inversores institucionales son quienes copan la inmensa mayoría de estas inversiones (el 93%, según spainsif), el número de pequeños inversionistas que también empiezan a mirar con lupa el destino que se da a su dinero se ha duplicado en los últimos dos años.