Economía

El IVA de las mascarillas volverá a subir

Dos mujeres caminan con mascarillas.

Dos mujeres caminan con mascarillas. / juan carlos vázquez

Desde que el 17 de noviembre se decretara el Real Decreto-ley 34/2020, el tipo impositivo del IVA de las mascarillas quirúrgicas quedó reducido, temporalmente, del 21% al 4%, una reducción que se aplicaba a las entregas, importaciones y adquisiciones intracomunitarias de mascarillas. Sin embargo, esta medida, como bien se adelantaba, tenía fecha de caducidad, y esta es el 31 de diciembre de 2021. 

Esta medida supuso un alivio inmediato para toda clase de economías domésticas, ya que, en ese momento, la mascarilla se había convertido en un bien de primera necesidad que precisaba ser repuesto continuamente. Si bien esta situación ha cambiado ligeramente, a día de hoy aún es necesario el uso de la mascarilla en espacios cerrados, así como en transporte público o cuando la aglomeración de personas así lo imponga. 

No obstante, es muy posible que, a partir de este fin de año, el IVA en las mascarillas quirúrgicas vuelva a aumentar a su estado natural, lo que supondría, automáticamente, una subida del precio

De esta forma, todo apunta a que, en enero de 2022, el precio de las mascarillas quirúrgicas aumentará de nuevo. Sin embargo, esto entra en contradicción con los Presupuestos Generales del Estado, donde se recoge que las reducciones de los tipos de gravamen aplicables a las mascarillas quirúrgicas desechables estarían vigentes hasta finales de 2022. Ante esto, el Ministerio de Hacienda ha explicado que se trata de un error y ha confirmado que el IVA del 4% solo será aplicable hasta el 31 de diciembre de 2021, tal y como lo establece el Real Decreto-ley 34/2020 en el que se aprobó la medida.

Obligatoriedad de la mascarilla

En la actualidad, y tal y como se apunta desde la página oficial de La Moncloa, desde el pasado 26 de julio de 2020, los supuestos en los que la mascarilla es obligatoria se restringe a espacios cerrados, lo que implica cualquier lugar cerrado de uso público o que se encuentre abierto al público; espacios al aire libre donde la aglomeración de personas no permita mantener 1,5 metros de distancia, medios de transporte públicos y eventos multitudinarios al aire libre.

Esto presenta excepciones que se aplican, por ejemplo, a las personas que padezcan algún tipo de enfermedad o dificultad respiratoria que pueda verse agravada por el uso de la mascarilla, o al desarrollo de determinadas actividades que, por su naturaleza, sea incompatible. 

Pese a la relajación de las medidas, la mayor parte de la población espera ansiosa la noticia que declare el fin de las mascarillas, algo que ha quedado aún en un deseo frustrado de los ciudadanos al haber recibido la notificación por parte de Carolina Darias, ministra de Sanidad, que declaraba que "La mascarilla ha llegado para quedarse, al menos mientras estén presentes el virus de la gripe u otros virus posibles en este tiempo otoñal", lo que ha descartado la esperanza de acabar con ella en primavera de 2022

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