Endesa sostiene que el "sacrificio" para acabar con el déficit de tarifa debe consistir en subir la tarifa de luz y considera necesario aplicar en dos años incrementos de entre el 35% y el 40% en la parte regulada del recibo, lo que se traduciría en alzas de entre el 15% y el 20% en el precio final.

Estos porcentajes casi duplican los ofrecidos por la eléctrica hasta el momento, ya que hasta ahora había aludido a dos subidas del 10% en la parte regulada en 2012 y 2013. Las nuevas cifras han sido ofrecidos por el consejero delegado de Endesa, Andrea Brentan, durante una conferencia con analistas organizada por Enel para presentar sus resultados anuales. La eléctrica italiana tiene una participación del 92% en Endesa.

Durante el encuentro, el consejero delegado de Enel, Fulvio Conti, afirmó que "el sacrificio tiene que venir de subidas de las tarifas", ya que "sus costes no han sido reflejados", y advirtió de que "solo cabe una vía" para acabar con el déficit, que es "cumplir el compromiso". Conti mostró "simpatía" con el Gobierno español, pero insistió en la necesidad de que "encuentre soluciones" y "cumpla con su obligación" de acabar con el déficit y de garantizar que las eléctricas recuperen todo el dinero que se les debe.

El directivo se mostró partidario de que continúen las emisiones de bonos para que la deuda eléctrica salga del balance de las cinco grandes compañías del sector y advirtió de que "no va a haber cambios en la recuperación" de esta deuda. Las eléctricas ya han aligerado un 60% de este pasivo de sus balances, señaló.

Por su parte, el consejero delegado de Endesa, Andrea Brentan, señaló a propósito de la reforma energética que prepara el Gobierno para acabar con el déficit de tarifa que "nadie sabe qué va a pasar", si bien "la solución es un asunto de muy alta prioridad" para el Ejecutivo español. "Para los próximos dos meses esperamos algo", añadió.

Brentan se mostró convencido de que "un complemento" para la solución serán las subidas de la Tarifa de Último Recurso (TUR) de la luz. "Todos los que hacen cálculos saben que en dos años la parte regulada de la tarifa existente debe subir entre el 35% y el 40%", lo que supone una subida del recibo final de "entre el 15% y el 20%", añadió. Brentan se preguntó si esta medida es "políticamente aceptable o no". "Para nosotros es absolutamente aceptable", contestó, antes de asegurar que Endesa no prevé que el Gobierno aplique "recortes" en sus retribuciones para acabar con el déficit de tarifa.

Durante su intervención, Conti afirmó que en la actualidad las economías de los países en los que opera la empresa está sufriendo "cambios dramáticos", pero se mostró convencido de que la situación ha llegado al "fondo" y empezará a remontar. "¿Estamos en la transición hacia peores noticias? No lo creo. Es un momento de paso y es posible que hayamos tocado fondo y lo que veamos en los próximos años sea un pequeño aumento de la demanda", afirmó.