La hora del Grupo Marsol Conquero ha llegado. Hoy empieza la fase por la permanencia en la Liga Femenina 2, y su salvación depende de tres partidos. El primero de ellos, esta tarde (Polideportivo de Los Remedios, 19.30 horas), frente al equipo anfitrión, el Pabellón Orense.

Este estreno ante el gran favorito -no podía ser menos- es muy complicado. Pero no más que el resto de partidos. Acabada la fase regular, el cuadro onubense empieza ahora una temporada nueva, de sólo tres jornadas, en la que el objetivo es ser uno de los dos primeros clasificados. Por eso no hay partido asequible ni triunfo asegurado con la victoria.

El Grupo Marsol tiene la lección aprendida, en este sentido. El técnico, Gabriel Carrasco, quiere que su equipo afronte cada partido como si fuera el único de la serie. Y, de hecho, de algo le servirá la experiencia adquirida el año pasado en Córdoba, donde consiguió el ascenso tras una brillante fase final. No obstante, con la permanencia en juego, ninguno de los cuatro equipos va a hacer concesiones, sobre todo el anfitrión.

Para este primer partido, el cuadro onubense espera aliarse con la presión que sentirá el Pabellón Orense en su papel de favorito para el primer puesto ante su afición.

A pesar del gran plantel con que cuenta el club gallego, en el Grupo Marsol se sabe que tiene opciones de lograr la victoria, tras dos encuentros igualados en la Liga regular. Todo pasa por dar la vuelta a la presión que se encontrará en la cancha y anular el juego de su triplete básico, formado por la base Laura Gil, responsable del gran ritmo de juego del equipo; la escolta estadounidense Jennifer Harris, máxima anotadora; y de la escolta belga Denisa Hazuchova, la especialista en tiro exterior.

En el plantel onubense, la gran incógnita es la participación de la base Berta Chumillas, que sufre una microrrotura muscular por la que se someterá a una última prueba sobre la cancha hoy mismo. En el ánimo del equipo onubense está empezar con buen pie la liguilla. Y, sobre todo, para terminar.