Tras el parón liguero propiciado por el puente de la Constitución y la Inmaculada, el equipo del Smurfit Kappa viajaba a la difícil cancha del Peñarroya con un objetivo claro, puntuar para de esa forma romper la racha de derrotas que acumula. Pero la falta de acierto condenaron al conjunto palmerino.El rival y la cancha no eran las ideales para conseguir el punto de inflexión a la situación que atraviesan los pupilos de Toni Gallardo, aunque los jugadores de La Palma salieron al campo muy mentalizados.

Fruto de esta concentración, los onubenses se adelantaron en el marcador con un gol de Juanjo en el minuto 7, pero la reacción de los cordobeses no se hizo esperar y en tan sólo 3 minutos consiguieron darle la vuelta al choque. A partir de ahí llegaron unos minutos de tanteo, con un equipo local controlando el juego y esperando para salir a la contra, mientras que los visitantes buscaban de forma desesperada el empate. Fruto de una pérdida de balón en el centro del campo, los de Peñarroya consiguieron el tercer gol en el último minuto de la primera parte.

Pese al palo, tras el descanso el Smurfit Kappa estaba seguro de la remontada, ya que en la primera parte había gozado de muchas ocasiones, pero nada más comenzar la segunda parte se encontró con un nuevo gol, que complicaba las cosas. Pese a ello, Toni Gallardo se fue decididamente a por el partido, colocando a Ramos de portero-jugador y utilizando a la tripleta de canteranos Alberto-Dani-Abel para realizar una presión asfixiante en toda la cancha. Fruto de dicha presión llegó el gol de Iván que hacía creen aún en la remontada.

A partir de aquí llegaron los mejores momentos de los visitantes, aunque de nuevo dos pérdidas en el centro del campo sentenciaron definitivamente el partido al colocar el 6-2 en el marcador. Juanjo, de doble penalti en el último minuto, logró maquillar el resultado.