El final del Guadalcacín-Bollullos, del pasado 9 de enero, se convirtió en una batalla campal en la que aficionados, jugadores y miembros del cuerpo técnico se enfrascaron en una pelea a base de puñetazos, empujones y patadas que se saldó, entre otras heridas leves, con la fractura del tabique nasal y una costilla rota del delegada del conjunto condal, según confirmó su presidente a este diario. 

Ahora, el Comité de Competición ha sancionado a tres futbolistas del Bollullos con cinco o más partidos, lo que a la postre va a significar que le van a restar un punto en la clasificación al cuadro onubense. Bazán ha sido castigado con seis partidos, cinco por agresión y uno por insultos; a Cristian y Fernando Guisado le caen cinco encuentros; tres a Said, dos por derribar al delegado del equipo contrario y otro por insultos y amenazas; y un partido a Samu.

Por parte del Guadalcacín el delegado del equipo, José Villena, ha sido castigado con un total de 24 partidos de sanción: 13 encuentros por agredir al delegado del equipo contrario; 10 por agredir a jugadores contrarios; y 1 más por insultos y amenazas a un jugador contrario.

Además, tres futbolistas del Guadalcacín tampoco escapan al castigo. De esta forma, a Fran Lobo le caen cinco partidos por agredir a un jugador contrario. Con el mismo número de encuentros es sancionado Fernando, mientras que Chuliki ve elevada la sanción hasta los seis encuentros, cinco por agresión y uno más por insultos. Juanca sólo ha sido castigado con un partido, quedando demostrado que no participó en la pelea.

Cierre de campo

Además, el Comité de Competición clausura el Fernández Marchán por un total de cuatro partidos por incidentes muy graves de público y resta tres puntos en la clasificación al equipo azulón. De esta manera, el Guada va a tener que jugar fuera de la pedanía los partidos contra el Espeleño, Arcos, Atlético Central y Castilleja y no volvería al Fernández Marchán hasta el 20 de marzo.

Por si fuera poco, a estos tres puntos menos habrá que restarle los que el Comité quitará al club por las faltas graves acumulativas de las sanciones al delegado y a los jugadores. Hay que recordar que según el régimen sancionador de la Andaluza, cada cuatro partidos de castigo se considera una falta grave y a las tres faltas graves se resta un punto en la tabla. 

Así las cosas, al Guadalcacín le quitarán un punto por los 13 partidos que le caen a su delegado (tres faltas graves) y otro más por las sanciones a sus tres jugadores castigados con cinco o más partidos.