También jugaron: Por el Recreativo: Víctor Díaz, Menosse, Juanan, Fernando Vega, Blati, Dani Molina, Josmar Zambrano, Aitor García, Koke y Caye. Todos los cambios del Recreativo fueron en el minuto 70. Sólo Sotres completó el choque. Por el Granada: Babin (16'), Fatau (46'), Iturra (46'), Nico (66') y Ortuño (66').

Árbitro: Rodríguez Varela (andaluz).

goles: 0-1 (22') El Arabi, tras golpear desde la frontal ajustado al palo. 0-2 (42') Machís aprovecha un regalo de la defensa recreativista.

incidencias: Alrededor de un millar de aficionados se dieron cita en el Ciudad de Lepe para presenciar el encuentro, con algunos seguidores granadinistas en las gradas.

Seriedad, orden y eficacia en ataque. No necesitó más el Granada. Es la seña de identidad de Caparrós. Una fórmula más que conocida en Huelva pero contra la que el Decano no encontró el antídoto ofensivo. Pasarán los años, cambiarán los colores y el técnico utrerano seguirá imprimiendo a sus equipos ese sello tan rentable que en el Decano significó tanto hace más de una década.

Oltra dispuso frente al Granada un once plagado de teóricos titulares. El doble pivote con Jesús Vázquez y Dimas se está consolidando en la pretemporada. La pareja da equilibrio y consistencia a los recreativistas, que durante gran parte de la primera mitad controlaron sin excesivos problemas al Granada. Por delante el técnico optó por la velocidad y la movilidad del tridente formado por Núñez, Joselu y Cabrera. Por la izquierda las constantes subidas de Nyom fueron aprovechadas por Toño para doblar a su par y buscar con sus centros el remate. Sin embargo, ni Joselu ni sus acompañantes en ataque son precisamente arietes puros para dar responder con acierto. El Recre se sintió relativamente cómodo en dos tercios del campo, pero a partir del centro le faltó fluidez y profundidad, ya que Jorge Larena no aportó el esperado último pase.

Su rival esperó tranquilo. Al más puro estilo Caparrós. Con un Granada práctico y aparentemente sin brillo aparecieron Sissoko y El Arabi para adelantar los granadinistas. Entre ambos trenzaron en el 22 la jugada del primer tanto nazarí. El Arabi recibió el cuero en la frontal del área y ajustó su disparo a la base del palo de Dani Sotres. El cancerbero cántabro poco pudo hacer.

El tanto permitió al Granada acrecentar su planteamiento. Los rojiblancos se hicieron fuertes en base a su seriedad y orden. El Granada mantuvo su intensidad, obligando con su presión al Decano a buscar una fórmula más directa para atacar, una propuesta en la que los onubenses se sienten más incómodos y con la que su rendimiento se resiente. Dio un paso atrás el cuadro visitante. Cedió metros y el balón sin complejos. El Recre pasó a dominar teóricamente, aunque el control siguió en manos del Granada. Los onubenses lo intentaron una y otra vez a la espalda de Nyom. Toño se convirtió en un atacante más. La falta de fluidez en ataque trató de suplirla Núñez, retrasando su posición ofreciéndose para generar superiorididad y romper desde más atrás.

Los granadinistas lo asumieron con tranquilidad. Dejaron hacer. Atrincherados y ordenados, esperaron su oportunidad para liquidar. Ni siquiera tuvieron que crearla, porque fue el propio Recreativo quien se disparó en el pie. Un error de Hernán Lopes en la salida del balón habilitó a Machis en el 42 para establecer el 0-2.

La pretemporada va tomando un cariz serio. A escasos 20 días para el comienzo de la Liga los experimentos y las pruebas van quedando atrás. Oltra no movió sus piezas y Caparrós sólo fortaleció su centro del campo con la entrada de Iturra y Fatau. Los dos conjuntos mantuvieron la base y la mayor parte de las caras. El choque fue un calco.

El Granada ni se inmutó. Mantuvo su orden, dejó correr la pelota y el tiempo sabiendo de su ventaja y dominio de la situación. La defensa nazarí apenas sufrió y el centro del campo con Iturra al mando superó a los albiazules. Fiel a la doctrina de su técnico, los visitantes no se descompusieron en ningún momento y esperaron con paciencia una nueva oportunidad. La tuvo Nico en el 67. Su golpeo lo repelió la madera.

Oltra optó por cambiar al equipo completo a los 70 minutos. Sólo mantuvo a Sotres. La entrada de los canteranos habituales despertó algo el duelo. El brío de los recién llegados rompió el tedio instalado en el Ciudad de Lepe. Las ganas no se tradujeron en fútbol. El Recre demostró un amistoso más sus escasos argumentos ofensivos. Defensivamente aprobó el duro examen contra el Granada, pero en ataque mostró muy poco. Ni siquiera el deseado Ortuño estuvo fino en el bando visitante.

El delantero es uno de los objetivos recreativistas. En Lepe estuvo bajo la atenta mirada albiazul. No brilló. Tuvo una triple ocasión clara en el 77 que detuvo providencialmente Dani Sotres.

El único disparo recreativista en toda la segunda mitad llegó en el 88. Un inocente disparo de falta desde la frontal que Roberto detuvo sin mayores complicaciones. Demasiado poco para generar problemas a un Granada que defensivamente mostró una enorme solidez.