El Rubias continúa sin conseguir la victoria en casa y cayó ante un Cruceño más efectivos. El cuadro local sigue en zona de descenso mientras su rival se asienta en la zona media de la tabla.

El partido resultó muy interesante, y tuvo claramente dos partes bien diferenciadas; la primera de dominio total del Rubias, pero sin aprovechar las ocasiones que tuvo, sobre todo por parte de Joaquín en un remate de cabeza, y José Iván, que disparó demasiado cruzado al filo del descanso. La primera mitad tuvo poco que reseñar, con dominio local ante un rival que se defendía y apenas generaba ocasiones de gol.

La situación cambió tras el descanso; la segunda mitad fue más disputada. El Cruceño realizó una mayor presión a los centrocampistas del Rubias, sobre todo a Juan Antonio y Chanete, lo que provocó numerosos robos de balón y rápidos contragolpes, que una y otra vez los rapidísimos delanteros visitantes, sobre todo David, Moisés y Miguel Ángel, conseguían presentarse con gran peligro ante Manuel José.

En el minuto 57 David aprovechó una de esas contras, aprovechó con gran velocidad desbordando a varios contrarios y disparó cruzado, entrando el balón junto a la cepa del poste.

La sentencia llega en las postrimerías del encuentro, con un Rubias volcado sobre la meta visitante en busca del empate. En un más que discutido posible fuera de juego Miguel Ángel anota el definitivo 0-2 aprovechándose de un rechace del poste tras un disparo de Moisés.

El Rubias se vuelca intentando casi un imposible, pero tampoco dispuso de claras ocasiones de gol para meter presión al contrario. Las dos aficiones estuvieron muy deportivas, destacando también el calor sofocante que tuvieron que soportar los jugadores sobre el terreno de juego.