Otro equipo en play-off para medir el buen momento del San Roque de Lepe. El conjunto aurinegro recibe en el Ciudad de Lepe al mediodía de este domingo al Mérida AD, tercer clasificado del grupo 4 de Segunda RFEF con 47 puntos, 8 más que el equipo lepero que intentará conseguir una victoria que mantenga vivas sus opciones de alcanzar la última plaza que daría derecho a disputar ese play-off de ascenso a Primera RFEF, una posición que ahora queda a 4 puntos.

Con el enfrentamiento ante el conjunto emeritense, el equipo entrenado por Antonio Fernández Rivadulla cierra un tramo de competición en el que se ha tenido que medir con cinco de los seis primeros clasificados, demostrando en todo momento no ser inferior a ninguno de ellos, ni siquiera al todopoderoso Córdoba. Victoria en Montijo, derrota con muy buenas sensaciones en el Arcángel cordobés, victoria convincente en Lepe sobre el Cacereño y empate la semana pasada en terreno del Villanovense. Este ha sido el balance de estos últimos partidos en los que plantilla y afición aurinegra han podido comprobar que ese sueño de pelear por la fase de ascenso no es imposible.

Para este partido, tendrá Antonio Fernández a su disposición a toda su plantilla tras cumplir Iván Robles sanción la semana pasada y la recuperación de Antonio López de su lesión, lo que le permitirá tras muchas jornadas salir de inicio con su mejor once sin tener que estar pendiente de las ausencias. También está disponible para el técnico aurinegro el último fichaje llegado a la plantilla esta misma semana, el central ucraniano Victor Lykhovydko, jugador libre de 30 años que llega para reforzar la zaga lepera en el tramo final de la temporada y que ya está inscrito en la Federación para poder jugar en cuanto su entrenador lo estime oportuno.

Ahora llega a Lepe un Mérida que es otro distinto al que se encontró el San Roque en la primera vuelta en el estadio Romano. En aquel partido consiguió el equipo aurinegro su primera victoria a domicilio, dando paso el equipo extremeño a una racha de cinco derrotas consecutivas que provocaron la destitución de su entonces entrenador, Juan García, y poco después de su sustituto, Javier Álvarez de los Mozos. La llegada de Juanma Barrero al banquillo emeritense le dio un vuelco total al rendimiento del equipo, con un balance desde entonces de ocho victorias, tres empates y solo una derrota que le han llevado a la tercera plaza que ahora ocupa.

En esa mejora del rendimiento del Mérida tienen su cuota de protagonismo dos futbolistas con pasado aurinegro, Bonaque e Higor Rocha, sobre todo el primero, que gracias a sus buenas prestaciones desde su llegada al club en el pasado verano, donde hasta el momento ha disputado 30 partidos, todos de titular, anotando 5 goles, la entidad le ha propuesto una renovación por dos temporadas, una propuesta que el defensa onubense ha aceptado esta misma semana.

En el caso del delantero hispano-brasileño, su participación está siendo menor de la que él mismo y su entrenador desearían por los problemas musculares que ya en su etapa en Lepe le hicieron perderse muchos partidos. En palabras de Barrero, “a Higor lo tenemos semana tras semana entre algodones y tenemos que buscar su recuperación a nivel físico que le permita jugar más tiempo, pero ahora solo podemos utilizarlo con pinceladas”, afirmó. Aun así, es el segundo máximo goleador del equipo con 6 tantos anotados, solo por detrás de los 9 de Lolo Plá.

Con esa duda sobre la participación de Higor Rocha de inicio o saliendo desde el banquillo, las bajas seguras en el Mérida para este partido son las de su lateral derecho Emilio Cubo por sanción y su delantero Diego López por lesión.

El San Roque podría salir de inicio con David Robador; Iván Robles, Alex Carmona, Becken, Fran Ávila; Adrián Ruiz, Charaf, Camacho; Abeledo, Chuma o Nané, Víctor Morillo.