El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, volvió a mantener ayer abierta la posibilidad de que el Mundial de Qatar 2022 cuente con 48 selecciones participantes. En principio, la FIFA tiene previsto realizar la ampliación de 32 a 48 selecciones en el Mundial de 2026, que organizarán en forma conjunta Estados Unidos, Canadá y México. Pero Infantino no cierra la puerta a tener un mega-Mundial dentro de cuatro años.

"¿Si sucederá ya en 2022? Lo veremos. Pero si es posible, ¿por qué no?", dijo ayer Infantino durante el Congreso de la Confederación Asiática en Kuala Lumpur.

Qatar se mostró dispuesto a ampliar el torneo, aunque con la condición de que los partidos se sigan disputando en los ocho estadios del emirato estipulados. Infantino especuló en varias ocasiones con la posibilidad de llevar el torneo a otros países de la zona del Golfo, pero las tensiones políticas en la región podrían dificultar la iniciativa.

Durante el encuentro en Malasia, Infantino intentó seducir a los países de la región al señalar que una ampliación del Mundial permitiría contar también con más participantes asiáticos.

"Tendrían una oportunidad más grande", indicó. "Lo estamos discutiendo con nuestros amigos qataríes y con muchos amigos en la región. Veremos qué sucede. Si no es posible, al menos lo habremos intentado".

Además, la FIFA reconoció ayer su preocupación por el robo de información de la entidad en un ciberataque en marzo pasado. "Tras el ataque ocurrido en marzo de 2018, la FIFA tomó una serie de medidas para mejorar la ciberseguridad y proteger a sus miembros", señaló la entidad en un comunicado. "Estamos preocupados por el hecho de que algunas informaciones hayan sido obtenidas ilegalmente".

Es la segunda vez que el ente rector del fútbol mundial sufre un ciberataque en los últimos tiempos. En 2016, el organismo también fue hackeado y se divulgaron una serie de informaciones de la FIFA vinculadas a las investigaciones antidopaje. El Departamento de Justicia de Estados Unidos y el FBI acusaron recientemente al servicio de inteligencia ruso por el episodio.

El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, dijo que teme que se divulguen informaciones sensibles como consecuencia del último ciberataque. "La FIFA condena cualquier intento de violar la confidencialidad de los datos de cualquier organización a través de métodos ilegales", indicó el organismo.