Recreativo-levante

Ganó el más necesitado

  • El Recre se empleó con más ganas con respecto al último partido en casa y mejoró su imagen · El equipo albiazul, cuando quiso no pudo, y cuando pudo no supo, ante un ordenado Levante.

Triunfo del Levante. A quien más le iba en un partido extraño, que se fue al descanso con un marcador inmerecido para el Decano, que luego dio la impresión que se resolvería por la vía rápida en favor de los granotas, y que al final hasta se empata. Derrota del Recre, una más en casa, aunque en un partido completamente diferente al de su última comparecencia ante sus aficionados. Ayer al menos el Recre corrió.

El primer tiempo del partido se resume así: una llegada, un gol. 100% de efectividad para el equipo que, deportivamente, más se jugaba. Fue el Levante, que castigó en exceso a un Recre decente, pero que se topó con lo que viene siendo habitual en él en toda la temporada: su definición.

Que nadie piense que el Decano hizo un buen fútbol y que se hartó de tener oportunidades. Nada de eso. Simplemente mostró una imagen mejorada de su fútbol imperfecto, llegó a las inmediaciones de Reina con mayor frecuencia, pero se topó con esa tradicional falta de puntería. Sin tener ocasiones claras, sin jugar excesivamente, sí atesoró los méritos suficientes como para retirarse a los vestuarios perdiendo.

Barrales y Braulio, en una misma acción, tuvieron el gol en sus botas pero se abstuvieron de rematar, el primero porque puede que no supiera como; el segundo porque dio la impresión de que no se atrevió. Ocurrió en el minuto 24, y ya entonces el Levante había defraudado un poco para lo que se estaba jugando, y el Recre mejoraba su última versión en casa -recuérdese que fue ante el Numancia, y que hacerlo mejor que ese día es fácil-.

El Recre del primer tiempo, con Aitor incorporado al trivote, no lo hizo mal. Tuvo presencia, tuvo ganas -ya se sabe, aún le quedan puntos para amarrar la permanencia- y hasta en varias ocasiones hasta combinó con sentido. Lo malo es que cuando llegó al área se le hizo de noche. Aitor, al menos tre veces, Óscar Díaz y Peña tuvieron centros francos, pero sus pases salieron rana. Aún así Reina tuvo que intervenir un poco más que Guaita, vendido por cierto en el gol de Rubén.

Está claro que el fútbol es el gol. Y eso quedó demostrado en la única oportunidad que el Levante, que se jugaba el ascenso, llegó al área local. Un centro de Juanlu y remate soberbio de Rubén. Gol.

No respondió el marcador de 0-1 a lo que se estaba viendo, pero el fútbol imperfecto de este Recre de culpas y pecados depara este tipo de situaciones, que hay veces que gana sin tirar a puerta casi, y otras en las que va por detrás en el marcador sin merecerlo del todo.

La segunda parte fue diferente. Al menos hasta que fue expulsado Iborra, en una acción en la que la falta la cometió Juanfran. Amoedo Chas se equivocó. Hasta ese instante el Levante había sido dueño y señor de la situación, y entonces sí había demostrado que era un equipo con la suficiente ambición.

La puesta en escena en el segundo tiempo fue desalentadora para el Decano. Porque su rival, en ese instante sí, buscó con más fe el gol, a sabiendas que era el momento idóneo para asestar el golpe definitivo a un partido que se le había puesto de cara en la única ocasión que había tenido. Con combinaciones rápidas, entrando por las dos bandas, el peligro fue constante en la portería albiazul, donde emergió la figura de Guaita, que fue el único responsable de que el partido no se muriera en el primer cuarto de hora de la continuación.

Xisco Muñoz, de cabeza tras un buen centro de Juanfran (53'); el mismo jugador (63') en un remate franco, dos ocasiones clarísimas para dar matarile al partido. En las dos Guaita obró el milagro. Entre ambas, para más inri, otro mano a mano de Javi Guerra con el meta que se fue a Puerto Sur, y la esperada expulsión de Barrales. Esperada porque desde que vio la primera amarilla en el minuto 8, el destino de un jugador que va al límite estaba señalado: los vestuarios antes de tiempo.

Fueron minutos en los que el Recre no existió. Sólo Guaita. El segundo, o tercer gol visitante, era cuestión de tiempo. No llegó. El Recre  cobró vida.  Mucho más cuando el inepto de Amoedo Chas expulsó a Iborra -segunda amarilla- por una falta que cometió Juanfran. El partido dio un vuelco. Además en el campo estaba Carmona que dio más frescura al equipo. Luego entró Dani.

Entre todos -incluyendo al ayer inconmensurable Jesús Vázquez- cambiaron el curso de los acontecimientos, y la pelota empezó a ronda la meta de Reina. Incluso la madera impidió el gol local en una acción increíble de Carmona. El Recre insistió, pero dinamita tiene poca, y su esfuerzo fue completamente baldío, si bien en las postrimerías el colegiado ignoró un penalti por manos de Juanlu. A la heróica lo intento, pero fue estéril su esfuerzo. Los puntos ya los tenía amarrado el Levante. Al Recre le quedó la pedrea de su mejor imagen.

Ficha técnica:

0 - Recreativo: Guaita; Raúl Cámara, Troest, Gallardo, Peña (Dani, m.75); Óscar Díaz, Jesús Vázquez, Rafa Barber (Pablo Sánchez, m.88), Aitor (Carmona, m.56); Barrales y Braulio.

1 - Levante: Manolo Reina; Cerra, Robusté, Ballesteros, Juanfra; Xisco Muñoz (Xisco Nadal, m.86), Samuel, Iborra, Juanlu; Rubén (Pallardó, m.72) y Javi Guerra (Rafa Jordá, m.79).

Goles: 0-1, M.32: Rubén.

Árbitro: Julio Amoedo Chas (colegio gallego). Expulsó por doble amonestación al recreativista Barrales (m.57) y al levantinista Iborra (m.63). Además, amonestó al local Dani y a los visitantes Ballesteros, Robusté, Cerra, Juanlu y Manolo Reina.

Incidencias: Partido correspondiente a la trigésimo sexta jornada del Campeonato Nacional de Liga de Segunda División disputado en el estadio Nuevo Colombino ante 5.600 espectadores. 10 

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