El Cortegana sumó su sexta derrota en casa al caer por la mínima frente a un Conil que se consolida en la zona noble. Los serranos no merecieron tanto castigo, pero perdonaron ante la portería contraria y no supieron materializar sus ocasiones, algo que sí supo hacer el cuadro gaditano.

Partido muy igualado entre dos de los equipos que mejor tocan el balón y mejor fútbol hacen, aunque ayer no estuvieron muy acertados, pero sí se vieron algunas pinceladas de buen juego, sobre todo por parte del Club Atlético Cortegana, que tocaba bien y abría rápido a las bandas, sobre todo en los primeros 20 minutos, donde Cárdenas fue de los mejores, marchándose de su par cada vez que controlaba el balón.

El Conil porqué está en la zona alta, bien plantado en el campo y sabiendo jugar la pelota, aunque ayer no creó demasiadas ocasiones de gol a los locales.

La primera oportunidad llegó en el minuto 2, para Rubén, quien se queda solo ante Quico y éste le adivina la intención, deteniendo el esférico. Cinco minutos después el mismo jugador se desmarca muy bien y otra vez solo ante el portal gaditano envía el balón alto. Y lo que es el fútbol, cuando mejor jugaban los locales llegó el 0-1 en el 14, en un fallo infantil de dos defensas, Isaac se encuentra con un balón muerto y sólo tuvo que pegarle para abrir el marcador, en la única ocasión visitante, y pocas más crearon en los 90 minutos.

En la jugada siguiente, contragolpe rápido del Cortegana: Reyes centra y Cárdenas consigue un gran gol, que fue anulado por un presunto fuera de juego por el colegiado a instancias de su asistente, muy protestado por el público. La primera mitad resultó muy igualada; los locales tuvieron las mejores ocasiones, pero la efectividad fue del rival.

Comenzó la segunda mitad como terminó la primera, con mucha igualdad entre ambos equipos, aunque los locales ponían algo más de ilusión para empatar, pero enfrente estaba un gran rival, que controlaba bien en defensa y centro del campo, aunque no inquietó mucho la portería local.

El que sí llevó peligro fue Roberto, con un tiro raso que detuvo bien Quico. Minutos más tarde, el capitán Carvajal tuvo el empate en un centro que le vino desde la izquierda, y cuando se cantaba el gol, incomprensiblemente, remató de cabeza fuera. Cuando se tienen ocasiones tan claras y se falla, se acaba pagando, y no es la primera vez que le pasa al conjunto serrano, que pese a la derrota no debe pasar apuros para conseguir la permanencia, ya que el único compromiso difícil que le queda es la salida a Punta Umbría, y luego tiene un calendario en casa bastante asequible.