Hacía mucho, pero mucho tiempo, que no se veía un partido con las características del que se jugó ayer en el Ciudad de Ayamonte, entre el club de la Puerta de España y el Bollullos del Condado, donde se multiplicaban las ocasiones, más en el primer tiempo para los visitantes, cambiando el signo en el segundo tiempo a favor de los de casa.

Comenzaba el partido guardándose un minuto de silencio, por el fallecimiento de Manuel Guerrero Reyes socio del club ayamontino y exdirectivo la entidad.

Durante los primeros 15 minutos, el partido se declinaba más por los rojinegros, aunque era un dominio sin peligro alguno, salvo en el minuto 12, cuando Cueto no supo aprovechar un despeje del portero bollullero. A partir del minuto 14, cuando se producía un tiro de Alvarito, que salía fuera por poco, el Bollullos se lanzó en tromba sobre el portal de Carlos, que tuvo que intervenir en cuatro ocasiones con marchamo de gol, como el que se producía en el minuto 26, cuando de cabeza, Sergio lanzaba un tiro que salía rozando el poste, ante el estupor de los muchos aficionados visitantes que acudían a ver a su equipo. En el minuto 29, nuevamente Alvarito lanzaba un tiro logrando desbaratarlo el portero local.

Mientras tanto, el Ayamonte corría más con el corazón que con la cabeza. La defensa, sobre todo por la parte izquierda hacía aguas, siendo aprovechada por el exterior bollullero, aunque sus centros no eran rematados a la red. Dado que, o Carlos hacía una gran parada o era fallado por sus compañeros. como fueron en el minuto 33, fallando Manu Romero, y en los minutos 42 y 43, cuando Alvarito y Manu Romero desaprovechaban las ocasiones para poner por delante a su equipo.

Con estas perspectivas, se llegó al descanso, suspirando los aficionados locales, y desesperados los visitantes, aunque estos últimos esperaban que para la segunda mitad, la suerte pudiera cambiar.

Y así fue, ya que con la entrada de Fofo por Pera, se afianzó la defensa, el centro del campo ya no trabajaban alocadamente, y fruto del dominio local, se produjo en el minuto 49, un saque de banda por parte de Fernando Guisado, que tras unos remates, lo aprovechó, Quique Silgado para lograra adelantar a su equipo en el marcador, ante el aplauso general de los muchos aficionados locales, y ante el estupor de los visitantes que veían que el partido se podía escapar, aunque quedaba aún mucho tiempo por disputar.

Pero la verdad es que la cosa cambio para los rojinegros. Ya no se corría alegremente, detrás del balón, sino que era el balón el que corría. Con el cambio de Cueto por David García, se consolidó más el centro del campo ayamontino, y se aprovechaba más los contragolpes, que eran auspiciados por los bollulleros que trataban de lograr la igualada, que estuvo a punto de producirse en los minutos 51 y 60, cuando sendos acercamientos al área local, el cuero salió fuera por poco y en el segundo intento se estrelló el travesaño.

También es verdad que, en un contragolpe, David Rodríguez lanzó un tiro desde el borde del área, a pase de Ordoñez, que la defensa saca cuando el cuero se colaba ante el portal bollullero.

Las jugadas clave tuvieron lugar en los minutos 73 y 74, cuando se produjeron dos fallos garrafales de los porteros de ambos conjuntos. El primero fue el de Carlos Soler que, al atrapar un balón sin importancia, se le escapó y dio en el travesaño, pudiendo lograr pararlo nuevamente. Y un minuto después, el fallo fue del portero visitante Maqueda, que al tener controlado un balón con el pie, nadie sabe lo que fue a hacer, pero lo es cierto que el joven Almagro, le arrebató el cuero, y escorado como estaba, logró batir el portal visitante.

Este gol, cayó como un jarro de agua fría a la afición bollullera, que veía que el partido ya estaba perdido. Pero antes de que el colegiado pitara el final del encuentro, se produjo otra ocasión visitante, en el minuto 76, estrellándose el cuero de nuevo en el travesaño.

Y por último en el 78, el central ayamontino, Fernando Guisado, con su saque de banda propició que Almagro tuviera una ocasión más del partido. Como resumen hay que decir que el Bollullos hizo en Ayamonte un gran partido, al que no le acompañó la suerte, y el Ayamonte aprovechó las que tuvo. Así es el fútbol.