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Amoedo, 'non grata' (2-1)

  • El colegiado marcó el encuentro con la expulsión de dos jugadores albiazules y obviando un claro penalti en los instantes finales. A pesar del árbitro, el Recre fue siempre superior al rival.

Árbitro: Amoedo Chas l (gallego). Desastroso. Sin criterio. Condicionó el resultado del encuentro.

Tarjetas: Roja Borda (6'), por el Recre; Paco Esteban (42'), por el Alcoyano. Amarillas Guille Roldán (67'), F. Miranda (71') y César Ramón (90'), por el Alcoyano; Córcoles (48'), Manolo Martínez (29'), Borda (5´) y Cifu (45' y 81'), por el Recreativo.

Goles 1-0 (8') Gato. De penalti. 2-0 (59') Álvaro. Define una acción iniciada por la banda izquierda. 2-1 (73') Juan Villar. Finaliza con calidad un buen pase de Pablo Sánchez.

Incidencias: Encuentro disputado en El Collao de Alcoy ante unos 2.500 espectadores. El piloto de motociclismo Nico Terol hizo el saque de honor.

Están los malos, luego vienen los peores y a continuación aparece la categoría Amoedo Chas. Recital esperpéntico de un colegiado que ayer opositó con firmeza a la declaración de persona non grata en Huelva. Su actuación fue demoledora. Dejó al Recre con diez a los ocho minutos, luego con nueve cuando más apretaba, mantuvo un permanente nivel sibilino que lo condicionó durante todo el encuentro y en los instantes finales le escamoteó un penalti de libro imposible de no ver. Mejor pensar que fue una mala actuación propia de un árbitro de ínfimo nivel que no ir más allá...

Lo que Amoedo le quitó en la primera mitad, Paco Esteban se lo devolvió. El penalti fue penalti y la segunda cartulina también, aunque no la primera que condicionó todo lo que vino después. La actuación del gallego mediatizó sobremanera un encuentro al que los recreativistas acudieron con recelo por la incomodidad del escenario y se encontraron con un enemigo de amarillo y con silbato que hizo más que el oponente. Sin criterio y mirando el escudo, dejó al Decano con uno menos a los ocho minutos y dio más quebraderos de cabeza a Cervera que su oponente. Afortunadamente para los albiazules, Paco Esteban dejó al Recre con diez en una cabalgada e igualó al borde del descanso con una acción absurda en la que agredió a un albiazul y vio la roja directa.

Entre ambas jugadas hubo poco fútbol. Un Decano que lo intentó todo sin demasiado acierto, pero mucha intensidad. Frente a esto, el Alcoyano se lo encontró todo de cara para llevarse el partido. Ventaja en el marcador y superioridad numérica en un escenario propicio para ello. Ante otro Recre lo habría tenido mucho más fácil. Éste, rigores arbitrales aparte, demostró tener el punto de madurez necesario como para no irse del partido. Incluso se mantuvo en disposición de plantearle batalla porque los locales demostraron su falta de recursos a pesar de la benévola situación.

Cervera movió el banquillo y las piezas. Tiró de pizarra. Mientras tuvo uno menos situó a tres centrales con Córcoles junto a Manolo Martínez y Zamora. Fidel y Cifu ejercieron de carrileros. Cuando recuperó la igualdad de efectivos regresó a la línea de cuatro atrás.

Diez contra diez el choque comenzó de nuevo con 45 minutos por delante. El empate no era ninguna quimera. La desventaja era mínima y el Alcoyano no había generado más peligro que el lanzamiento desde el punto de penalti en toda la primera parte del encuentro.

Salió con fuerza el Recre. Fidel a los cinco minutos de la reanudación tuvo la ocasión más clara del choque para el empate. Su remate de cabeza salió fuera por muy poco. La acción despertó a los albiazules, que pasaron a tomar el control del choque, mientras los alicantinos se aprestaron a defender con no poco sufrimiento y buscar algún contragolpe.

Cuando mejor lo tenía cometió un error letal. Zamora erró en la salida del balón. El Alcoyano recibió el regalo, abrió a la banda de Cifu y logró el segundo de forma sorprendente. Tanto que ni los locales daban crédito. Tiro y medio a puerta en todo el encuentro y dos tantos a favor. Surgió el carácter albiazul. El segundo no tuvo efecto alguno en el Recre, más allá de la distancia mayor en el marcador. El Decano siguió controlando el juego y buscando a su oponente. En su campo y con un cómodo tanteo, el Alcoyano lo pasó muy mal.

Cervera dio entrada a Juan Villar buscando el estímulo del onubense. Un chispazo suyo metió a los albiazules en el partido. Una contra bien llevada con Pablo Sánchez la culminó tocando con sutileza el cuero al fondo de la portería de maestro.

Con quince minutos por delante, el empate tenía que llegar. El Alcoyano no era mejor que el Recre ni había hecho nada para llevarse los tres puntos. El conjunto recreativista apretó hasta encerrar a su rival en su campo. Demasiado agobio debió pensar Amoedo Chas. El gallego decidió echar otra mano más al cuello albiazul y expulsó a Cifu.

Ni con nueve pudo el Alcoyano soltarse de la presión. El Recre siguió insistiendo con fe y cabeza. Entró por las bandas y buscó insistentemente a Juan Villar. Al menos, una iba a llegar. Era cuestión de aprovecharla cuando se produjese.

Amoedo Chas siguió con especial homenaje al despropósito. Mandó a Cifu al vestuario sin que mediasen motivos suficientes y luego le quitó al Decano la posibilidad del empate en sus narices. A falta de seis minutos para el final miró para otro lado mientras su asistente hacía lo propio en una mano clamorosa en el área. La guinda a una actuación escandalosa.

Juan Villar pudo convertirse en el héroe de la tarde a pesar del árbitro gallego. El serrano tuvo la ocasión para igualar casi con el tiempo cumplido pero su balón dio en el palo. De todos modos, hubiese sido demasiado pronto para igualar porque todavía hubiese tenido tiempo Amoedo Chas para volver a situar el marcador como parecía empeñado en dejar.

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