Y esto... ¿de quién es? | Crítica

Feliz crisis familiar

Una imagen de esta comedia familiar francesa.

Una imagen de esta comedia familiar francesa.

Justo cuando pensábamos estar ante una versión francesa del corte de la última saga familiar de Santiago Segura, a saber, ante el retrato paródico de la enésima familia numerosa y sus pequeñas cuitas pequeñoburguesas y cuñadistas, Y esto… ¿de quién es? nos sorprende poco a poco en sus revelaciones y virajes cómicos no aptos para almas conservadoras o creyentes en el modelo más convencional y normativo del núcleo de convivencia sanguíneo.

Y es que la cinta de Poulain-Arnaud gira siempre hacia el terreno más liberal y tolerante ya desde su misma premisa de partida, cuando la madre (estupenda Alexandra Lamy sosteniendo el pulso de principio a fin) descubre un test de embarazo positivo en la basura y se pone a investigar de cuál de sus hijos puede ser; una premisa que, lejos de plegarse al terreno de lo preocupante, libera el filme hacia un estallido coral de crisis que se resuelve siempre en un tono festivo sin caer nunca en la tentación moralizante.

Hay que celebrar así que la comedia familiar escape de sus prisiones, dé voz y carta de naturaleza a personajes actualizados y rebaje las consecuencias dramáticas de una separación con el desparpajo que lo hace esta pequeña y breve cinta que se toma la vida de clase media y sus problemas con un optimismo a prueba de espíritus censores.