Presentación melódica de los pilotos de esta joven agrupación, la primera en subirse a la tablas del Gran Teatro el quinto día de las semifinales del Concurso de Carnaval 2017 de Huelva. En el primer pasodoble esconden el escenario de un terrorista suicida y de un policía, con una letra para hacernos pensar. La música es demasiado plana, aunque destacan el punteo y la percusión. El segundo es pasodoble para las guerras de las custodias de los niños. Comienzan diciendo que un niño es lo más grande que le puede pasar a una pareja y cuando se tuercen las cosas ellos son los grande perjudicados.

El primer cuplé escatológico, muy feo y el segundo no mejora al primero.

En el popurrí, los integrantes de la agrupación tiran de fuerza para intentar arañar los puntos necesarios. Creo que no les da para llegar, pero es una comparsa que si sigue en esta línea dará que hablar, aunque como dicen ellos, en Carnaval no hay amigos y puede que los desmonten.