Perfil del nuevo ministro

Dastis, brillante y prudente

  • El nuevo responsable de la diplomacia española, Alfonso Dastis Quecedo, de 61 años, se crió junto a La Asunción y estudió en el colegio de los Marianistas de Jerez.

“¿Ministro de Asuntos Exteriores? Ese es su sitio natural”. Así se expresaba ayer un compañero de banca de Alfonso Dastis Quecedo en el Colegio de los Marianistas de Jerez tras conocer su nombramiento. Para sus amigos era y es, simplemente, Poncho.

El nuevo responsable de la diplomacia española es el tercero de cuatro hermanos (Margarita, Antonio y Jesús), con los que se crió en Jerez, pero como ellos marchó fuera de la ciudad tras acabar el Bachillerato, en su caso el de Letras, que entonces estudiaban muy pocos alumnos. 

 

“Era un chico muy inteligente, era brillante sin despeinarse”, recuerda un amigo que mantuvo el contacto con él hasta hace pocos años, cuando esporádicamente ha visitado Jerez. De niño vivió en una casa de la barriada de La Asunción, que entonces era el campo, y más tarde en un piso de la calle Francos que ha seguido ocupando ya de adulto. De familia sencilla, su padre era celador, tuvo la oportunidad de estudiar en Madrid, en el Centro de Estudios Universitarios (CEU) gracias al apoyo de su tía Dora Quecedo, inspectora de Educación que destacó como autora de libros de enseñanza y de literatura infantil en los años setenta. Ella apadrinó a sus sobrinos y les ayudó a que se labrasen un futuro.

 

Aficionado a la música, es un gran seguidor de la banda estadounidense Creedence Clearwater Revival, cuyos discos acostumbra a escuchar con sus amigos. No mantiene mucha relación con la ciudad que le vio nacer debido a su trabajo, aunque reconoció en una entrevista a Diario de Jerez en diciembre de 2006 que esta tierra “me trae muchos recuerdos de la infancia, el sol, la alegría y la simpatía de mis paisanos. Cuando noto mucho esa falta, tengo la suerte de poder pasar unos días por allí. Mi esperanza es estar grandes temporadas en Jerez cuando mis funciones me lo permitan”.  

 

“Inteligente, trabajador, serio”,  quienes lo han tratado de cerca califican esta designación como “un buen nombramiento”. “Es un hombre que pertenece a la vieja línea del diplomático, serio y responsable, aunque de carácter jovial”, añaden estas mismas fuentes. “Privado y cauteloso, es un hombre de familia” que se ha visto sin embargo obligado a vivir mucho tiempo fuera. Para sus amigos es “una persona muy sencilla, muy tranquila y con una parsimonia admirable”. Muchas de las cualidades básicas para un buen diplomático. Su mujer, a la que conoció en  la universidad, también es abogada. Tienen dos hijos. Uno de ellos logró que dejase de ser aficionado del Atleti para hacerse del Madrid.

La ficha:

Nacimiento: Jerez de la Frontera.

Edad: 61 años.

Profesión: Licenciado en Derecho. Diplomático.

Releva a José Manuel García-Margallo.

Experiencia: Diplomático desde hace tres décadas, ocupando puestos como embajador en La Haya o la Representación Permanente ante la UE desde 2011.

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