Los sindicatos sevillanos de enseñanza han llamado a la comunidad educativa a que se unan a la huelga convocada para este martes, 4 de marzo, y han pedido a los docentes y alumnos del más de medio millar de centros de la provincia a que secunden una movilización que protestará contra el decreto de escolarización recientemente aprobado.

En una rueda de prensa celebrada el mediodía de este lunes en la sede de ANPE de Pagés del Corro, los sindicatos (ANPE, CSIF, CCOO, UGT y Ustea), así como la Confederación Andaluza de Asociaciones de Madres y Padres (Codapa) y el Frente de Estudiantes (FdE), han informado de que la manifestación de este martes dará comienzo a las 12:00 en la Puerta de la Carne y desembocará en el Palacio de San Telmo. Las protestas, sin embargo, se desarrollarán durante toda la jornada, habiendo una segunda convocatoria a las 18:00.

Las entidades promotoras de la huelga, que protagonizarán manifestaciones en las ocho provincias andaluzas, consideran que el citado decreto de escolarización no ha sido elaborado "fruto del consenso" y que además "ignora el dictamen del Consejo Escolar de Andalucía", el órgano de participación democrática de la comunidad educativa.  

Un desmantelamiento de la educación pública

Si desde la Codapa han criticado la nueva normativa por ahondar en el "desmantelamiento" de la educación pública que viene produciéndose desde hace años, los sindicatos, que han coincidido con esa crítica general, han rechazado el decreto y la orden que lo desarrolla por los beneficios que tales textos suponen para la enseñanza concertada en detrimento de la pública.

Consecuencias perniciosas a medio plazo como la progresiva pérdida de unidades educativas en los centros públicos o la "segregación de alumnos con necesidades de apoyo educativo" han sido mencionados por los representantes de los docentes.

Un decreto de escolarización innecesario

La portavoz del CSIF, Manuela Tagua, que durante la rueda de prensa en la que se ha anunciado la huelga de este martes ha representado al resto de sindicatos convocantes, ha detallado sobre el decreto de escolarización aprobado por la Consejería de Educación que se trata de una medida innecesaria, dado que al 93% de las familias les correspondía la escolarización en el centro de primera opción. "Es un ataque a la enseñanza pública", ha resumido Tagua.

En cuanto al carácter ideológico de la huelga, que es el modo en que tachan el paro desde el Gobierno de la Junta, la portavoz de Ustea, Beatriz Raposo, ha recordado a los dirigentes andaluces el "amplio color político" representado entre las entidades convocantes. "La norma se ha redactado sin consenso", ha advertido Raposo, "pero lo que sí ha tenido consenso es el rechazo en la respuesta".

El portavoz de ANPE, Antonio Brea, ha incidido en la gravedad que conlleva que la Consejería de Educación no haya atendido las recomendaciones del Consejo Escolar andaluz y ha explicado que este órgano, que representa a toda la comunidad educativa, cuestionó en su dictamen que la Administración beneficiara a la enseñanza concertada y que el concepto de "demanda social", reiteradamente proclamado por el consejero del ramo, Javier Imbroda, no quede supeditado al interés público.

Para Javier González, de UGT de Sevilla, el nuevo decreto de escolarización supone una riesgo para los requisitos de igualdad y equidad de la educación contemplados en la Constitución española. 

Por no atender estas exigencias y, sobre todo, por los efectos perjudiciales que acarrean, los sindicatos, la Codapa y el FdE han llamado a toda la comunidad educativa, más de un millón de personas en las ocho provincias, a unirse a la huelga de este martes, una movilización que en Andalucía no reunía tal consenso desde 2013.