El Gobierno autonómico quiere que Andalucía sea "verde, digital, competitiva y sostenible". Ése es el mensaje que la presidenta de la Junta, Susana Díaz, trasladó ayer al auditorio que asistió a la inauguración de la jornada La sostenibilidad en la empresa y la competitividad: Una visión estratégica para hacer frente al cambio climático.

La iniciativa, organizada por la Fundación Cajasol, a través del Instituto de Estudios Cajasol, y por las consejerías de Empleo, Empresa y Comercio y de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio de la Junta de Andalucía, abordó los retos que las empresas andaluzas tienen ante el cambio climático, fenómeno sobre el que el Parlamento regional está debatiendo una ley, que será la segunda norma de rango autónómica en esta materia tras la catalana.

Díaz aborgó por una sostenibilidad ligada a la competitividad y quiere que esté vinculada a la marca de Andalucía, para que sean "un signo distintivo", a través "del diseño de los planes de negocio de las empresas a medio plazo". "Andalucía tiene la posibilidad de ser una potencia verde y digital, sostenible y competitiva", dijo la presidenta andaluza, que cree necesario para ello aprovechar el proceso de conversión a industrias 4.0. "Estamos en condiciones de hacerlo" señaló Díaz antes de recordar que "el mercado global y más exigente va a apostar por la sostenibilidad".

La jefa del Gobierno andaluz animó a impulsar las buenas prácticas tanto en las grandes empresas como en las pequeñas. Y puso como ejemplo de concialición los avances conseguidos en los mayores polos industriales de la comunidad, los de Huelva y el Campo de Gibraltar. "Son ejemplo de que se puede reconciliar la industria con el medio ambiente", aregó Susana Díaz.

A su juicio, 2018 es un año clave en el desarrollo de un nuevo ciclo económico y resaltó que factores como la estabilidad política y económica con que cuenta la comunidad "lo favorecen".

Esa Andalucía verde, digital, competitiva y sostenible que defiende Díaz debe hace una "gestión del presente que genere riqueza" pero que al mismo tiempo "preserve el futuro y deje un legado en nuestro patrimonio y entorno natural".

El presidente de la Fundación Cajasol, Antonio Pulido, que intervino antes que Díaz en la inauguración de la jornada, recordó que "el compromiso y la lucha contra el cambio climático apela a los poderes públicos, pero también de manera muy intensa al sector privado".

Pulido reconoció que se "están dando pasos importantes adelante, también necesitamos imprimir una mayor intensidad y velocidad" con el objetivo de poder "llegar a tiempo a este enorme desafío".