Andalucía

Policías finlandeses viajan a Málaga para identificar a cuatro de los fallecidos

  • Los forenses recurren al ADN y a pruebas dentales para reconocer a algunas de las víctimas mortales · La Guardia Civil custodia al supuesto causante del accidente · 18 heridos aún permanecen ingresados

Los expertos del Instituto de Medicina Legal tendrán que recurrir a pruebas dentales y de ADN para poder identificar a cuatro de los nueve turistas de origen finlandés fallecidos en el accidente de tráfico ocurrido el sábado en la A-7, a la altura de Benalmádena (Málaga).

El director del Instituto de Medicina Legal, Antonio García de Gálvez, confirmó ayer que los forenses han podido establecer la identidad de cuatro adultos y la niña que perdieron la vida en el siniestro. Sin embargo, la identificación visual no ha dado resultado con los otros cuatro cuerpos, de ahí que tengan que recurrir a pruebas suplementarias.

Dado que en Finlandia no existen bases de datos de huellas dactilares, la identidad se tendrán que establecer a partir de pruebas dentales y de ADN. Miembros de la Policía Científica de Finlandia colaborarán en las investigaciones.

El delegado del Gobierno en funciones en Andalucía, Juan José López Garzón, se desplazó a Málaga e informó de que los efectivos de la agrupación de Tráfico de la Guardia Civil han iniciado una investigación en detalle acerca de las causas y las circunstancias que están detrás del accidente mortal.

Los primeros indicios de los que disponen los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado concluyen la responsabilidad directa del conductor del todoterreno, de 28 años de edad. Este joven, según confirmó el delegado del Gobierno, circulaba con una tasa de alcohol de 0,5, el doble de lo permitido, motivo por el que fue detenido por la Guardia Civil. Los agentes lo custodian en el Hospital Clínico Universitario, donde está ingresado recuperándose de las heridas que sufrió.

Según la hipótesis inicial, el conductor del todoterreno perdió el control, colisionó con el guarda rraíl derecho, rebotó y chocó a su vez con la parte trasera del vehículo de pasajeros, provocando su desestabilización y el vuelco. Debido a la inercia, el autobús recorrió unos 50 metros de autovía arrasando con la separación metálica, objeto que acabó por convertirse en uno de los elementos clave de la muerte de vario de los pasajeros. "Ha sido como una espada", señaló López Garzón.

No obstante, la Guardia Civil ha ampliado el marco de la investigación, debido a que testigos presenciales habrían afirmado que el turismo intentó superar al autocar por la izquierda, informó Efe.

En Helsinki, el primer ministro, Matti Vanhanen, y el de Asuntos Exteriores, Alexander Stubb, comparecieron para exponer las últimas informaciones que barajaban sobre el accidente de autobús.

En cuanto al parte de heridos, una mujer de algo más de 50 años permanecía en estado crítico en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) del Hospital Carlos Haya de Málaga. Es la única de la que se teme por su vida, de las 18 personas que ayer permanecían ingresadas en diversos centros hospitalarios de la Costa del Sol.

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