El alcalde de Estepona, David Valadez, aseguró ayer que aún no se le había notificado ninguna imputación y que "ningún juez ha solicitado información sobre esta presunta irregularidad", por lo que mostró su "pesadumbre, tristeza e indignación".

El pasado jueves el TSJA confirmó que Valadez está imputado por los presuntos delitos de prevaricación urbanística y omisión del deber de perseguir delito. Esta causa partiría de un denuncia de finales de 2008 sobre la construcción de una vivienda sobre suelo rústico por parte de su jefe de gabinete.

Valadez explicó que sí se la ha comunicado que recibirá una notificación "en la que se pone de manifiesto la existencia de una denuncia y que hay un procedimiento abierto", aunque apuntó que "desconoce la autoría del denunciante, cuando se presentó y el juzgado que lo instruye, porque lo único que sé es a través de los medios de comunicación". "La indefensión es absoluta y estoy convencido de que este asunto se archivará", señaló, aunque de antemano lamentó el daño causado al municipio.

La dirección regional del PSOE cerró filas y defendió la honestidad de Valadez, entendiendo que detrás de este asunto está la actitud "histérica y miserable" del PP, que ayer volvió a pedir la dimisión del regidor y anunció que pedirá la disolución del Ayuntamiento y la convocatoria de elecciones municipales.

Para el secretario de Organización del PSOE-A, Rafael Velasco, el "ataque" del PP es "impresentable" porque "busca rédito electoral" haciendo unas acusaciones "sin conocer la verdad de los hechos", ya que, según recordó, Valadez inició un expediente sancionador por los hechos que se le imputan. Un peldaño más arriba en el PSOE-A, su vicesecretario general, Luis Pizarro, afirmó que "no hay caso", porque se está ante una "actuación correcta" y "todo es un montaje del PP, porque cuando surgió esto Valadez no era alcalde".