Vivir en Huelva

Gamba blanca: Parapenaeus longirostris

En el sur se vive y se come bien, pero en Huelva... en Huelva contamos con una joya de valor incalculable: la Gamba. Sí la gamba con mayúsculas, la gamba blanca.

Pero este marisco no sólo está vinculado a nuestra buena mesa, sino que afecta a diferentes órdenes de nuestra sociedad.

Resulta un reclamo turístico de primera magnitud, tenemos miles de personas que vienen a pasar unos días de vacaciones sólo para comerlas y disfrutarlas.

Supone un bien preciado para los marineros de la costa onubense, que viven de su pesca.

Y en definitiva, un referente sin parangón en otros pagos, en todo el país cuando se quiere decir gamba de calidad extrema se dice: ¡Gamba de Huelva!

La gamba es un marisco decápodo de cuerpo alargado y aplanado lateralmente con una sutura en el cefalotórax y tres espinas en la parte anterior del rostro, está curvado hacia arriba y tiene ocho dientes en el dorso, ojos grandes, aplanados dorsalmente, flagelos anterulares muy largos con una dimensión similar a su cuerpo.

Los tres últimos segmentos del abdomen muestran una cresta dorsal y una serie de espinas características de la especie, con telsón finalizado en tres dientes.

Su color es anaranjado claro siendo más rojizo en el rostro, su caparazón es transparente por lo que se ve la región gástrica de color violáceo y en la hembras los ovarios se ven de color verde; en el abdomen tienen dos manchas laterales de color butano.

Su hábitat se sitúa en fondos arenosos entre los cien y los doscientos cincuenta metros, realizando migraciones verticales al parecer relacionadas con los ciclos solares y lunares.

Su talla se mide en unidades por kilo que varía entre la gamba gigante con cincuenta unidades kilo a mediana con ciento cincuenta unidades kilo; su precio varia también mucho según la talla:

Se dividen en: gigantes 50 u/kg, gordita 70 u/kg, extra 75 u/kg, plancha gordita 90 u/kg, terciada 100 u/kg, plancha mediana 110 u/kg, distinguida 130 u/kg, mediana 150 u/kg, arrocera 170 u/kg.

Se alimenta de detritos y también de pequeños organismos como poliquetos, moluscos y crustáceos.

Su carne es blanca con un contenido graso del 1,5%, un contenido proteico del 18% y 87 kilocalorías a los cien gramos, lo que las hace muy digestibles. Contiene hierro y potasio lo que las hace ideales para dietas antianémicas.

Se pescan por arrastre todo el año aunque las mayores capturas se efectúan en noviembre y diciembre, meses con mayor demanda y precio.

Se comercializa fresca, congelada (viene de Marruecos) y cocida en cajas de madera que tienen una gran aceptación y demanda por parte de los turistas o veraneantes cuando vuelven a sus casas como regalo para sus amigos o familiares.

Su consumo es fundamentalmente:

-Cocidas: simplemente cocidas tres minutos.

-Plancha: plancha baja que no se pasen.

-Arroces: arroz caldoso con gambas.

-Guisos: caldereta de mariscos.

-Ranchos: rancho de gambas con patatas.

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios