"Aportar colorido" a los centros educativos, así como posteriormente al resto de espacios públicos de Ayamonte, es el objetivo con el que el pintor y artista plástico local Chencho Aguilera ha concluido recientemente dos grandes murales, el primero de ellos en la Escuela de Idiomas de la ciudad fronteriza, y el otro en el Centro de Educación Infantil y Primaria Moreno Chacón.

Así lo ha señalado a Huelva Información el propio artista, heredero de una conocida saga de pintores ayamontinos que se inició con su abuelo, Rafael Aguilera; prosiguió con su padre, Florencio Aguilera; y tiene garantizada por muchos años su continuidad gracias al joven Chencho.

Según ha narrado el propio pintor, la idea de llenar de color los espacios públicos de Ayamonte se le ocurrió nada más terminar su mural en la Escuela de Idiomas y tras la propuesta que le hizo el director del CEIP Moreno Chacón, José Antonio Morales López, para que hiciese algo parecido en un gran muro de los patios de dicho centro educativo.

Chencho no se lo pensó ya que, entre otras cosas, la iniciativa le serviría para varias cosas. En primer lugar para aportar colorido a los espacios públicos en un municipio como Ayamonte, famoso por ser tierra de pintores y artistas plásticos; en segundo lugar para fomentar y dar a conocer entre sus vecinos la cultura urbana y el arte mural, según él "poco conocida pero muy importante en la actualidad"; y en tercer lugar con fines didácticos, ya que los alumnos del centro han sido testigos directos del día a día y la evolución del trabajo de Aguilera en su centro, recibiendo incluso clases prácticas de manos del propio artista durante la elaboración del mural.

Para la realización de la obra, el pintor y el centro llegaron a un acuerdo por el que el primero ha puesto al servicio del proyecto su creatividad, la idea, el boceto y el trabajo de elaboración del mural, mientras que el centro ha aportado todos los materiales necesarios para ello.

En este sentido el director del Moreno Chacón ha señalado estar "muy agradecido" y "encantado" con el trabajo de Chencho; y que no sólo para él, sino para toda la comunidad educativa, es "un gran honor" lucir en sus paredes la obra de un "gran artista" como es Chencho Aguilera. No obstante, ha añadido, lo más importante, y quienes más agradecidos están, son los aproximadamente 600 alumnos que "han disfrutado y aprendido" durante la elaboración del mural gracias a la "empatía" que con ellos ha tenido el artista, que ha impartido para ellos "auténticas clases prácticas" y al que han acogido en el seno del centro como "el maestro Chencho".

El mural tiene unas medidas de trece metros de ancho y seis y medio de alto, está realizado al acrílico y con botes de espray, y representa a una niña leyendo un libro plácidamente en un parque. Y es que según Aguilera, las ideas claves del trabajo son su integración en el entorno donde se ubica, un pequeño parque arbolado donde bulle la alegría a la hora del recreo de los pequeños, pero que también rezuma tranquilidad cuando éstos pasan a clase; y en el elemento didáctico con la finalidad de fomentar el amor por la lectura entre los más pequeños.

Finalmente, Aguilera ha querido incidir en dos elementos básicos. En primer lugar en invitar a otros artistas locales a incorporarse y colaborar en un proyecto cuya finalidad básica no es otra que embellecer los espacios públicos de la localidad haciendo gala de la vena artística de la ciudad fronteriza; y en segundo lugar en que la idea ha sido "muy bien acogida por el resto de directores de centros de Ayamonte con los que ya Chencho ha hablado. El próximo reto, el CEIP Padre Jesús, un centro que para Aguilera tiene un fuerte contenido emocional "porque fue mi colegio de pequeño, donde pasé innumerables horas de mi infancia aprendiendo y disfrutando". El artista ya trabaja en la elaboración de la idea y los bocetos.